Una labor humana y ecológica

El centro de Sóller fue abierto en 1994, contando con la ayuda del Ajuntament de Sóller, el Ferrocarril de Sóller, Asociación Hotelera, PIMEM-Sóller, Cruz Roja Española en Sóller y el Grupo Serra, todos ellos bajo la coordinación de la Asociación Deixalles de Sóller.

Miguel Puigrós, gerente de la entidad, afirma que Deixalles cuenta en la actualidad con un total de diez usuarios, tres monitores, un trabajador social, uno para ventas, un coordinador y un operario de mantenimiento del antiguo vertedero de sa Figuera, y cuenta con un número de socios que aportan anualmente 3.000 pesetas por persona. En este taller se construyen los antiguos y tradicionales Plateros, así como los clásicos caballitos de madera tan atractivos. Estos se elaboran a través de las maderas viejas de los somiers de madera. Las barras son troceadas, lijadas, y se diseña el caballito. Luego se pasa por el proceso de montaje, más tarde es barnizado y se concluye la puesta a punto con la elaboración de una etiqueta de referencia en donde se especifican sus características y cómo ha sido elaborado. Es un trabajo de auténticos maestros, en donde nuestros usuarios encuentran un estímulo y una importancia a la vida.