A pesar del poco espacio que ha ocupado, en un rincón, entrando al recinto, al fondo a mano derecha, donde apenas lo ve nadie, el 'llaüt' de José Antonio de Toca ha sido uno de los más visitados en la pasada Baleart, celebrada en Palma hace una semana.
Y es que, observándolo detenidamente, el pequeño barco es una maravilla, tanto estética como técnicamente, lo que evidencia el gusto y la sabiduría en materia naval que tiene el autor de la obra, de oficio offset impresor jubilado, o lo que es lo mismo, offset impresor hasta su jubilación anticipada, por tanto no deseada, pero que no ha tenido más remedio que aceptar.
Lo cierto es que, hoy por hoy, José Antonio con sus barcos tiene el tiempo más que ocupado (que otra cosa es lo que le rente económicamente esta ocupación). Porque hay que ver cómo son sus acabados y cómo funciona en general, lo cual es la resultante, no de la improvisación sino de un trabajo tan meticuloso como laborioso.
Según explica a las personas que se acercan a contemplarlo, hacer este 'llaüt' le ha llevado muchas horas de trabajo que se han visto recompensadas por una magnífica obra: el «Valeri». Réplica exacta, a escala 1/5 del Bohemio, un 'llaüt' mallorquín con solera y muchas horas de navegación, construido por el mestre d'aixa Domingo Truyols en el año 22, en Alcúdia.
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