En Mallorca, las neules son anuncio de la Navidad. Lucen con todo su esplendor en iglesias y monasterios y tienen su origen en la Edad Media. Las neules de papel tienen especial protagonismo en las manos de un auténtico artista en la materia, el hermano teatino Juan Barceló, natural de Inca, que se inició en esta actividad artístico-artesana a la edad de siete años, siendo alumno del colegio La Salle.
Más de quinientos modelos componen su colección, con los más variados motivos. En estos momentos, por estar convaleciente de una intervención oftalmológica, no puede realizar un gran despliegue en cuanto a la realización de las típicas neules.
«Esta labor "afirmó el hermano Barceló" requiere mucha paciencia. Me inspiro en modelos antiguos que luego voy reformando y también aporto otros de creación propia. Algo que tengo muy en cuenta son los acabados o 'puntas', que realizo de distintas formas. Los tamaños oscilan entre los diez y cinco centímetros de diámetro». La técnica que emplea es la de recortar con 'cutter' sobre papel blanco plastificado un dibujo impreso en fotocopiadora. No faltan sobre su mesilla de trabajo el compás y también unas pequeñas tijeras, por si le conviene recortar alguna en papel doblado con varios pliegues.
Los motivos recortados son múltiples. Van desde los temas florales, escenas de payeses mallorquines, adornos navideños de campanas, velas y ciervos, a las más sofisticadas de escudos de órdenes religiosas, del Vaticano, de Palma, y los propios del tema religioso de la Navidad como son Misterios, huida a Egipto y Reyes.
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