La reunión de ayer para constituir la comisión tripartita de
Seguridad Privada tenía que haber sido de trámite pero se convirtió
en una nueva pugna entre UGT y CC OO, quienes ahora deberán buscar
la unidad de acción si quieren conseguir resultados. La reunión se
prolongó dos horas porque UGT amenazó con levantarse si no se
reconocía que dicha comisión ya existía y que de lo que se trataba
era de ampliarla.
La reunión concluyó con la firma de un acta en la que se acuerda
incorporar a la Delegación del Gobierno y a la Conselleria de
Treball a la mencioanda comisión.
Pese a esta disputa dialéctica lo que ha quedado claro es que
esta comisión adquiere una nueva dimensión por la entrada de dos
instituciones implicadas en el sector como son la Delegación del
Gobierno y la Conselleria de Treball y que presionarán a ambas
partes para llevar la paz en el sector. En este contexto, el
conseller Grosske advirtió que «seré beligerante con quien tenga
que serlo».
El objetivo de esta comisión es «crear las condiciones para un
crecimiento armónico y normalizado del sector y para la resolución
de los conflictos laborales que se han suscitado en su seno» señala
la acta. Esta comisión trabajará por un lado en la determinación de
aquellas actuaciones administrativas que puedan ayudar a un
desarrollo normalizado en todos aquellos ámbitos donde sea posible;
y por otro lado, la reanudación de la negociación de los puntos
relativos a las relaciones laborales en el sector. La próxima
reunión tendrá lugar el 13 de enero.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.