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El coordinador del Partido Popular en las Islas y ex conseller de Agricultura, Josep Juan Cardona, aseguró ayer que el Govern tiene en su mano la posibilidad de abaratar el precio de todo tipo de combustibles en las Islas y que para ello únicamente tiene que expropiar las infraestructuras de la Compañía Logística de Hidrocarburos, CLH, en Palma.

Esta posibilidad se contempla en un informe jurídico realizado por técnicos de la CAIB que fue presentando por el PP en el Parlament. El actual Ejecutivo se comprometió a estudiarlo pero pocas semanas después argumentó que no podía expropiar debido a que el informe se basaba en el diferencial de precios que existía entre las Islas y la Península y que esa diferencia ya no existía. El coordinador del PP reconoció que uno de los argumentos del texto que avalaba la expropiación era que el precio del combustible en las Islas era más caro que en la Península, «pero también es cierto que el fondo de la cuestión es el abuso de posición dominante de mercado que tienen las operadoras».

Para Cardona, que asegura que las empresas que gestionan CLH alegan «problemas técnicos» para impedir que otros operadores desembarquen combustible, la expropiación permitiría la libre competencia en las Islas y, por tanto, un descenso en los precios. Cardona recordó que, aunque los precios de venta al público sean similares a los de la Península, el precio de desembarco de combustible es tres veces superior en la Isla que en la Península y apuntó la posibilidad que los colectivos que necesitan el crudo para desarrollar su trabajo se unan para traer grandes cantidades una vez se liberalice el uso de la instalación.

«Un grupo de payeses se puede juntar y comprar un barco lleno de gasóleo en cualquiera de las refinerías del mundo a un buen precio y luego traerla a la Isla. Pero para que eso sea posible las infraestructuras de CLH deben de estar a disposición de quien la necesite», aseguró Cardona.

Las organizaciones agrícolas secundan la petición
Los representantes de las organizaciones agrícolas de la Isla, Joan Mas, de Unió de Pagesos, y Fernando Dameto, de la FAGB, se sumaron al argumento realizado por el político popular y reconocieron que la expropiación de los terrenos de CLH permitiría la entrada de otros operadores y, por lo tanto, la bajada del precio del combustible e incluso la asociación de colectivos para traer su propio combustible.