Los Reyes Magos de Oriente, aprovechando su paso por Porreres, colaboraron en la fiesta de inauguración de la Plaça del Molí de n'Amengual. La nueva plaza cuenta con zonas verdes y juegos infantiles, pero lo que más llama la atención es la remodelación del antiguo molino. Además, en el proyecto se ha incluido una sínia que, con motivo del estreno oficial de la plaza, funcionó, a la vieja usanza, accionada por una bístia.
Los más pequeños del pueblo acudieron en masa a la inauguración acompañados por sus padres y madres. Los Reyes Magos habían prometido un regalo sorpresa para todo aquél que estuviera presente en la fiesta y nadie quiso perderse ver a Melchor, Gaspar y Baltasar antes de su llegada a la Plaça de la Vila.
Los Reyes llegaron con las carrozas y los camiones cargados de regalos y, junto a la banda de música, fueron recibidos por las autoridades locales, que también esperaban algún regalo por haberse portado bien -o no- durante el año. Los magos de Oriente regalaron un Llum d'oli a las tres propietarias a las que el Ajuntament compró los terrenos para poder construir la plaza.
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