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Como cada año, una vez concluidas las fechas navideñas, los escaparates de los comercios de la Isla aparecieron ayer repletos de carteles en las que se anuncian rebajas y las calles se llenaron con individuos cargados de bolsas repletas de productos que adquirieron a un precio inferior al habitual.

La jornada perfecta para los buscadores de «oportunidades» comenzó en las puertas de El Corte Inglés, donde, a primera hora de la mañana, ya se concentraban un centenar de personas. Esta muestra inicial del interés de los palmesanos por las ofertas se multiplicó algo más tarde, cuando las calles comerciales se llenaron de curiosos y compradores en potencia de productos rebajados entre el 10 y el 50 por ciento según el establecimiento. El día de ayer, aseguraron las diferentes fuentes consultadas, transcurrió con total normalidad, con una afluencia de compradores similar a la del año pasado y con niveles de ventas en los pequeños comercios «en un principio aceptables», según señaló Demetrio Peña, presidente de Pimeco.

Esta primera semana de rebajas, según el portavoz de El Corte Inglés, Pep Ramis, los compradores se suelen decantar por la ropa de temporada, que, con rebajas de hasta un 50 por ciento, es el producto que más reduce su precio. Posteriormente, dentro de unos días, los usuarios se decantarán por las llamadas «compras pausadas», es decir electrodomésticos, muebles y ropas del hogar o por productos con menos rebajas como zapatos o joyas.

Por su parte, las organizaciones de consumidores aprovecharon la jornada para reiterar las recomendaciones habituales a los compradores. Entre otras, las organizaciones recomiendan que se exija el ticket de compra y recuerdan que el producto debe tener en la etiqueta el precio inicial y el resultante de aplicar el descuento. En este sentido, desde el Govern balear se aseguró que se va a potenciar la labor inspectora para evitar «prácticas ilegales».