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La Fiscalía de Menores de Balears tendrá que revisar la situación de 300 jóvenes que cometieron delito entre los 16 y 18 años con motivo de la entrada en vigor de la Ley del Menor pasado mañana, sábado. La consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, confirmó que en las Islas sólo había un joven de 19 años que necesitará ingresar en un centro de régimen cerrado y, por tanto, lo hará en el de Es Pinaret.

Los destinatarios de la nueva Ley del Menor engloba a los tramos de menores de 14 años, mayores de 14 y menores de 18, y mayores de 18 y menores de 21 años, aunque para estos últimos existe una moratoria de dos años para su aplicación. Según el criterio de la Fiscalía, deberá declararse extinguida la responsabilidad de aquellos que siendo mayores de 14 años a la entrada en vigor de la Ley, estén cumpliendo o se hallen a la espera del cumplimiento de una medida impuesta por hechos cometidos antes de los 14 años. Todo ello, porque la nueva Ley declara irresponsables penalmente, sin excepción, a todos los menores de 14 años y prohíbe toda intervención sobre los mismos, lo que obliga a su aplicación retroactiva.

Caro expresó su preocupación por la entrada en vigor de la Ley en Balears: «Nosotros prevemos que la convivencia será dificultosa porque un centro de menores como Es Pinaret, aunque sea un centro cerrado, tiene una dinámica educativa y, por lo tanto, hay una diferencia importante con lo que es una prisión», afirmó. «También, hay una diferencia de edad porque, en concreto, la persona que debe ingresar el día 14 tiene 19 años y convivirá con chavales de 14. Confiamos en que el equipo de educadores tenga capacidad para abordar esta situación y desde luego nosotros pondremos todos los medios necesarios para que la convivencia sea adecuada», precisó.

Según admitió la consellera de Benestar Social, «hay mucho incertidumbre porque nosotros no sabemos tampoco que va a pasar con las más de 300 causas que están en los juzgados de instrucción, y que al aplicarse esta ley se tendrá que acoger a la Ley del Menor y los encausados no a irán a prisión, sino que pasarán directamente al juez de menores».