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El Consell de Mallorca lanzará a partir del próximo lunes una campaña, bajo el lema «Cerquem famílies cangur per infants que volen futur», dirigida a promover las acogidas temporales de menores en familias no consanguíneas. Se trata de un mecanismo de protección del menor orientado a evitar que los niños que han tenido que separarse de forma temporal de sus familias a causa de una decisión administrativa o jurídica, estén en un centro.

La campaña fue presentada ayer por la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar; la responsable del Departamento de Serveis Socials del Consell, Josefina Sintes, y el delegado general de La Caixa en Balears, Francisco J. Conrado de Villalonga. La campaña tiene un coste de 130 millones de pesetas, de los que 30 millones los aporta la Fundació La Caixa. Josefina Sintes expuso que, en la actualidad, 241 niños de 0 a 18 años se encuentran acogidos en centros institucionales de Mallorca, de los que entre 150 y 200 podrían pasar a vivir con una 'familia canguro'.

Por otro lado, señaló que un total de 300 niños viven con la familia extensa (abuelos maternos, paternos, tíos o hermanos) y sólo siete permanecen en familias no consanguíneas. Según Sintes, la mayor parte de los padres de estos menores proceden de entornos marginales o conflictivos que han provocado, por ejemplo, situaciones de desamparo o comportamientos violentos hacia sus hijos.

Este programa dará prioridad a la acogida de menores de entre 0 y 12 años y se dirigirá fundamentalmente a familias con más de un hijo, si bien la responsable de Servicios Sociales aseguró que, es este sentido, «no se discriminará a nadie por razones de sexo o edad». Las 'familias canguro' deberán tener presente que se trata de una acogida temporal, con un límite máximo de dos años, y que en ningún caso será un proceso de adopción. Estas familias recibirán ayudas de entre 40.000 y 80.000 pesetas al mes para mantener a los menores.