J. L. Ruiz Collado31/05/01 0:00
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Las comparecencias ante la comisión parlamentaria no permanente de investigación sobre los sistemas de contratación que se han llevado a cabo en la empresa pública Instituto Balear de Turismo (Ibatur), pusieron ayer de manifiesto la situación irregular de algunas de las contrataciones realizadas bajo la etapa del PP y del Pacte de Progrés. La ex directora general de Ibatur, Josefina Martínez, reconoció ante los miembros de la comisión que pensaba que Ibatur se trataba de una empresa privada, de ahí que contactara durante el verano de 1999 con V. Creixel, M. Picornell y C. Uberten con el fin de incorporarlas a Ibatur, pero a la hora de formalizar el contrato desde la Conselleria de la Funció Pública se le indicó que había que realizar un concurso público.

En la resolución del concurso, pese a la presentación de 50 candidatos, las tres personas contactadas por Martínez fueron seleccionadas, «por ser las mejores», según apuntó la ex directora de Ibatur. Esta circunstancia fue criticada por algunos miembros de la comisión, poniendo en tela de juicio la resolución de este concurso, que perjudicó los intereses del resto de candidatos que se presentaron al mismo. Tanto Creixel como Picornell reconocieron ante la comisión que habían contactado con Martínez en agosto de 1999. Fueron estas contrataciones las que motivaron la creación de la comisión parlamentaria de investigación por parte del Pacte de Progrés, «para que se aclarara todo», tal y como explicó ayer el conseller Celestí Alomar en su intervención.

También comparecieron ante la comisión, M. Marquès Ratier, P. Llinás, R. Pons y A. Coll. Tres de ellos reconocieron que habían sido contactados por el ex director general de Promoción, Eduardo Gamero, quienes se incorporaron a Ibatur de forma directa por currículum. La cuarta persona sí que entró mediante concurso. Los ex gerentes de Ibatur, S. Morey, V. Blach y el ex director general de Promoción, P. Pascual, fueron criticados abiertamente por el representante del PSOE en la comisión, pero su gestión fue valorada de forma positiva por el PP, a través de José María González Ortea. El conseller de Turisme, Celestí Alomar, fue el último en comparecer, quien insistió en que el objetivo de la comisión era aclarar todo lo relacionado con las contrataciones, «para eso se creó».