Juan Mestre01/06/01 0:00
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El Parlament cumplió ayer la mayoría de edad y abrió sus puertas a los ciudadanos. Hace 18 años, la Cámara se constituía por primera vez en sa Llonja en los primeros pasos de la autonomía balear. Han pasado ya muchos años, pero el Parlament sigue siendo una institución desconocida para muchos ciudadanos, que ayer tuvieron la oportunidad de recorrer todas las dependencias de la Cámara balear. Más de mil personas visitaron la sede del Parlament.

«Esta es la casa de la democracia y es muy bueno que los ciudadanos la conozcan; hacía muchos años que no se realizaba una jornada de puertas abiertas y, ante el éxito de la convocatoria, habrá que intentar repetirla cada año», destacó Maximiliano Morales, presidente del Parlament, a propósito de la iniciativa impulsada por la Cámara balear. Las puertas del Parlament fueron abiertas a primera hora de la mañana hasta las 9 de la noche. Los grupos de personas que visitaron la Cámara desfilaron durante todo el día en el Parlament, guiados por el personal de protocolo que explicaba los detalles del edificio. Los dos accesos a la Cámara, el situado en Palau Reial y el de la calle Conqueridor, se encontraban abiertos para todos los ciudadanos que quisieran ver el edificio.

Además, la jornada de puertas abiertas permitió que muchos medios de comunicación realizasen una parte de su programación desde el salón de plenos del Parlament. Así, Ultima Hora"Radio emitió parcialmente desde la Cámara autonómica su programa matutino dirigido por Àngela Seguí, y lo mismo hicieron la COPE y Televisión Española. Este último medio emitió su informativo regional desde el Parlament. Además, el programa «Amics i coneguts», que presenta la periodista Cristina Ros en TeleNova, se grabó también en la Cámara balear. Otros medios radiofónicos también aprovecharon la jornada de puertas abiertas para emitir desde del Parlament.

La jornada provocó escenas curiosas. El hecho más llamativo se produjo durante la emisión de un programa de radio, que contó con la intervención del presidente del Parlament, Maximiliano Morales. Poco antes de comenzar el programa en directo, una turista se colocó junto a Morales para que su esposo, ataviado con pantalón corto, sandalia y sombrero de paja, la fotografiara. Morales contemplaba la imagen, inimaginable cualquier otro día del año. Hace dieciocho años, el Parlament no tenía nada que ver con el de ahora. Por no tener no tenía ni edificio y los plenarios tuvieron que celebrarse de prestado en sa Llonja. Ahora, en cambio, el Parlament tiene un edificio y está a punto de inaugurar el segundo, que contará con tres plantas para los diputados. Son las ventajas de cumplir 18 años de edad.