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819 aspirantes a un puesto de trabajo en la Administración autonómica, informáticos, psicólogos, químicos, biólogos, entre otras especialidades, se enfrentaron ayer a la primera prueba -un test sobre conocimientos jurídicos común en los cuerpos facultativos superior y técnico- de las oposiciones. La oferta pública de ocupación para el año 2001 efectuada por la CAIB es para cubrir 37 puestos de trabajo en las catorce especialidades del cuerpo facultativo superior, por los cuales se han recibido 444 solicitudes y 31 plazas en las once especialidades de facultativos técnicos, por los cuales se han recibido 375 instancias.

Ramón, un joven psicólogo que se ha presentado a las pruebas, reconoce que «jugarse el futuro profesional con un test y exámenes eliminatorios crea una gran ansiedad. Yo, aunque teóricamente sé que es así, reconozco que estoy tan nervioso como cualquier otra persona».

Para Ana, una joven bióloga, optar a una plaza en la Administración es una garantía de futuro, aunque reconoce que «tampoco es el sueño de mi vida» y sin embargo manifestó, al igual que la inmensa mayoría de sus compañeros, que «estoy bastante nerviosa, aunque ya me he tomado dos tazas de tila».