Unió Mallorquina anunció ayer que apoyará al Govern si aprueba la
modificación de las Directrices de Ordenación del Territorio y la
ley del suelo, pero descartó tajantemente apoyar nuevas moratorias
que sean impulsadas por el gabinete autonómico. «La reforma de las
Directrices y la redacción de la ley del suelo figuran en el Pacte
de Progrés, pero nada más; si algún partido del Pacte quiere hacer
nuevas propuestas en materia de política territorial que las haga y
que las presente a las próximas elecciones», advirtió el secretario
general de UM, Bartomeu Vicens.
El «número dos» de la formación que lidera Maria Antònia Munar
apuntó que una de las normas de UM «es garantizar la seguridad
jurídica de los ciudadanos de Mallorca». «El ciudadano no puede
levantarse cada mañana y encontrarse normas urbanísticas
diferentes; creemos que con la moratoria que aprobó el Consell hace
unos días es suficiente para frenar el crecimiento urbanístico en
Mallorca», insistió Vicens.
La intención del presidente del Govern, Francesc Antich, es
llevar al próximo Consell de Govern la aprobación de la ley del
suelo y la modificación de las Directrices de Ordenación del
Territorio. De hecho, Antich ha convocado a los diputados de su
grupo, en una reunión que se celebrará el jueves por la noche, para
anunciarles los acuerdos que aprobará su gabinete en el Consell de
Govern del día 3, el último antes de empezar las vacaciones de
verano. Antich quiere reunir a sus diputados pocas horas antes de
la reunión del Govern para evitar que puedan filtrarse detalles de
las dos normas, que han tenido que ser impulsadas con urgencia
después de la decisión del Consell Insular de Mallorca de aprobar
la moratoria urbanística. El propio Antich ya insinuó a los
periodista el viernes que la semana política que acaba de empezar
«será muy animada». El portavoz del Govern, Antoni Garcías, no
quiso adelantar en la rueda de prensa del pasado viernes si las
normas urbanísticas verían la luz, finalmente, el día 3 de agosto
porque, según dijo, «no es una carrera entre las
instituciones».
Unió Mallorquina anunció la semana pasada que sus votos no
servirían para aprobar alguna modificación que supusiese un
incremento de las parcelas mínimas para construir en suelo rústico.
«Con los votos de UM no se aprobará ninguna modificación para
aumentar la parcela mínima», advirtió Miquel Nadal, vicepresidente
del Consell y dirigente de la formación nacionalista. La postura de
UM en relación a estas normas urbanísticas que quiere aprobar el
Govern esconde, en realidad, un malestar por los últimos
acontecimientos políticos y, en especial, por la presentación de
una moción de censura en Sineu. La presidenta de UM, Maria Antònia
Munar, quiere reunir a su ejecutiva en septiembre y provocar la
convocatoria de una reunión del Pacte tras el incumplimiento por
parte del PSM de la regeneración democrática, uno de los puntos del
documento que sirvió para cerrar el pacto entre todas las fuerzas
progresistas.
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