La compañía Iberia realizó ayer su último trayecto con los
históricos aviones DC-9, dentro del plan de renovación de flota que
lleva a cabo desde 1999, utilizando para ello la ruta Palma-Madrid,
en un gesto de la compañía que preside Xabier de Irala para
reconocer el papel que este modelo de avión ha cumplido en el
desarrollo de la industria turística balear y en el tráfico
interinsular, del que desaparecieron en noviembre de 1999 para ser
sustituidos por los polémicos turbohélices Fokker-50 y ATR-72 de la
compañía Air Nostrum.
El DC-9 «Martín Alonso Pinzón» fue el encargado de realizar el
último vuelo comercial, en un trayecto al cual fue invitada la
prensa y medios de comunicación local para cubrir esta efeméride,
una más dentro de la historia de la aviación española, que ha
tenido su colofón en las Islas. Este tipo de avión han sido
sustituidos de forma progresiva por aviones Airbus-320 y Mc Donnell
Douglas MD-87, «dos de los aviones más modernos del mundo para
corto/medio radio en la actualidad», según indican desde Iberia. La
desaparición de los DC-9 de Iberia se suma a la desaparición de los
DC-9 de Aviaco en los vuelos interislas que se produjo a finales de
1999, circunstancia que propició la entrada de los aviones
turbohélices de Air Nostrum en estos trayectos.
Dentro de la historia de Iberia, el primer DC-9 de la compañía
llegó en junio de 1967 y recibió el nombre de «Villa de Madrid».
Desde entonces y durante estos 34 años, los aviones de este modelo
han recibido el nombre de numerosas capitales españolas, entre
ellas Palma, Eivissa y Maó, así como de personajes históricos. La
importancia que ha tenido este avión para Iberia y Aviaco, se
refleja en los 47 aviones que el grupo Iberia ha contado de este
modelo, «fue el tercer modelo de avión reactor que adquirió la
compañía española, ras el DC-8 y el Caravell. Este avión fue el
encargado de realizar los primeros vuelos de la compañía española a
la Europa del Este, en concreto al destinos como Varsovia, Budapest
y, posteriormente, Moscú. La flota de Iberia de estos aviones ha
realizado 1.971.762 horas de vuelos y 1.941.004
despegues/aterizajes».
Fabricados por la McDonnell Douglas Corporation, los DC-9 de
Iberia, dedicados hasta hoy a realizar vuelos de corto/medio radio,
tienen una longitud de 36'37 metros, una envergadura de 28'47
metros, un alcance de hasta 2.700 kilómetros y disponen de 110
plazas para pasaje. Durante mucho tiempo, este avión realizó las
rutas Balears-Península y los vuelos interislas, siendo uno de los
instrumentos que contribuyeron al desarrollo turístico de las Islas
en los años del denominado «boom turístico» de finales de los
60.
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