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La Comissió de Govern celebrada ayer en el Ajuntament de Palma acordó desestimar las alegaciones presentadas al acuerdo municipal de 12 de abril de 2000 por el que se aprobaba iniciar la expropiación forzosa de ciertos inmuebles propiedad del INVIFAS y sitos en las calles Bala Roja, Baluard del Príncep, Gabriel Alomar i Villalonga, y la plaza Porta des Camp. El teniente de alcalde de Urbanisme del Ajuntament de Palma, Rafel Vidal, señaló que «se trata de un tema administrativo», dijo, y añadió: «En la alegación conjunta se pedía que no se iniciase la expropiación».

«Lo único que dice el informe jurídico llevado a cabo por los servicios técnicos de Cort es que el Pla General d'Ordenació Urbana (PGOU) prevé esta expropiación para hacer una zona verde y que no ha lugar a la petición que se hace», prosiguió. Vidal señaló que se les había comunicado ya a los afectados el inicio del expediente de expropiación. «Ellos han hecho alegaciones, entre ellas ésta, y ahora, tras contestar las alegaciones vienen ya las proposiciones de justiprecio», indicó.

«Ahora esperamos que cada vecino nos diga si está de acuerdo con el justiprecio o qué quiere a cambio de la expropiación, es decir, si quiere un realojo, una indemnización económica o la compra de una vivienda», prosiguió Vidal. El teniente de alcalde de Urbanisme señaló que el Ajuntament de Palma está recibiendo las respuestas, «y a raíz de las mismas sabremos exactamente la postura de cada vecino en concreto. Además, también tenemos reuniones frecuentes con ellos», añadió. «Espero tener acordada una solución con la mayoría de afectados por la expropiación a finales de año», indicó Vidal, para concluir: «Tenemos buenas relaciones con la mayoría de vecinos, a pesar de que hay puntos de vista diferentes en ciertos puntos, pero yo espero llegar a un acuerdo con la mayoría de ellos».

Por su parte, el presidente de la Asociación de Vecinos del Baluard del Príncep, Ginés Ayala, elegido el pasado mes de marzo, señaló que la asociación había mantenido desde entonces cuatro reuniones con el Consistorio. «A las dos últimas asistió el alcalde de Palma, Joan Fageda», dijo. «En septiembre se reanudarán las conversaciones, y si bien mantenemos puntos de vista diferentes en según qué aspectos, hay que valorar el hecho de que haya diálogo, y no cabe descartar que se pueda llegar finalmente a un acuerdo satisfactorio para los afectados por la expropiación», concluyó.