Historia en estado puro de un edificio, de unas instituciones, que se pasea por todos sus rincones y descubre sus detalles. El libro «El Consell de Mallorca. Història i patrimoni», presentado ayer, recorre el Palau del Consell en imágenes y resume la existencia de las diferentes instituciones isleñas. La parte histórica se une a la arquitectura y las vidrieras, es decir, al patrimonio. Todo tiene cabida en un volumen que se destinará, en un principio, a los visitantes ilustres que visiten el edificio.
Las imágenes reproducen desde la escalera del Palau hasta las gárgolas del mismo, pasando por la biblioteca y los retratos de los diferentes presidentes del CIM. El fotógrafo Donald G. Murray empleó más de un año en el proceso de búsqueda y captura del elemento destacable e importante desde el punto de vista histórico. «Me pasé mucho tiempo dentro del edificio», aseguró Murray. El objetivo: conocerlo en profundidad. El resultado, un «niño» que hace incidencia tanto en la monumentalidad como en los detalles, sobre todo en los detalles.
El bebé nació de la «necesidad del CIM de contar con un obsequio que explicase a las personas qué significa esta institución», explicó Miquel Nadal, Vicepresidente del Consell. Además, el hecho de unificar el patrimonio con la historia de la institución lo convierte en un «libro de síntesis», según Margalida Tur, cordinadora del proyecto. «Hasta el momento, no existía un libro que hablara de todos estos aspectos». Para Maria Antònia Munar, presidenta del CIM, el documento permitirá «conocer las diferentes épocas de la historia de las instituciones de Mallorca». Munar reconoció que «es importante conocer el pasado para entender el presente y hacer proyecciones del futuro».
El libro se divide en seis apartados. En el primero, «Antecedents del Consell de Mallorca», escrito por Pere Fullana, se hace incidencia en «la evolución histórica de las instituciones propias de Mallorca», comentó Tur. En este apartado, se repasan hechos como la introducción de los Decrets de Nova Planta o la existencia del Gran i General Consell, pasando por la Diputación Provincial. El segundo capítulo habla sobre la historia más reciente. «El Consell de Mallorca (1979-2001)» se basa en las fuentes orales, es decir, los protagonistas de los acontecimientos, y en la prensa. Los apartados tercero y cuarto están escritos por Catalina Cantarellas y explican «L'edifici del Consell de Mallorca: l'arquitectura», donde se recorren las dependencias del edificio, y «L'escultura monumental». El capítulo quinto, «Les vidrieres artístiques», de Núria Coll muestra las vidrieras del Consell y, el último, «La col·lecció pictórica», de Marià Carbonell, los cuadros del Palau.
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