El debate generó una gran expectación entre los colectivos feministas y mujeres del PP. Foto: T.AYUGA

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La paridad electoral ya es un hecho. El Parlament aprobó ayer, con los votos en contra del PP, la reforma de la Ley Electoral de Balears que obligará a los partidos a incluir el mismo número de hombres y mujeres en sus listas electorales. El sistema cremallera impone que si el primer puesto de la candidatura es ocupado por un hombre el segundo lugar debe estar reservado para una mujer y así sucesivamente. La ley entrará en vigor en las próximas elecciones autonómicas. La reforma electoral provocó ayer uno de los debates parlamentarios más intensos de esta legislatura. De hecho, la tribuna de invitados se llenó de representantes de colectivos feministas y de mujeres del PP.

La diputada popular María Salom acusó al president Antich de promover la paridad electoral «para utilizar a las mujeres y llenar las urnas con sus votos». «Esta ley sólo afecta a las mujeres que se dedican a la política», planteó Salom, quien defendió que «la inteligencia de las personas no debe medirse por el sexo». La diputada del PP reprochó al Govern de Antich de «cambiar la ley electoral sin garantías jurídicas» y reprochó al Pacte que no hubiese solicitado un informe al Consell Consultiu para que avalase la paridad. Salom volvió a criticar que en el Govern sólo hubiese tres conselleras y apenas 14 de los 74 altos cargos de la Comunitat Autónoma estuviesen ocupados por mujeres.

El diputado de Formentera, Santiago Ferrer, defendió la paridad y planteó que «los que están enfadados son los hombres del PP porque ven comprometida su presencia en las listas electorales». Josep Portella, de Esquerra Unida, aseguró que «esta ley es un reto para todos los partidos», mientras Bosco Gomila, del PSM, opinó que «sería un insulto no hacer nada para incorporar a las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad».

La socialista Francina Armengol aseguró que era un orgullo para ella «defender esta ley, que será un símbolo como lo fue cuando la Segunda República permitió que las mujeres pudiesen votar». «Nosotros no hemos dicho nunca que esta ley solucionará los problemas que tienen las mujeres, pero esta es una ley innovadora y la Comunitat balear seguirá progresando a pesar del PP», dijo Armengol. La diputada socialista defendió la innecesidad de no solicitar un informe al Consell Consultiu porque «en Castilla"La Mancha los estudios jurídicos ya han avalado la paridad». «Cualquier mujer se siente insultada por lo que dice el PP sobre la paridad», concluyó Armengol.

En su segunda intervención, María Salom recordó que hasta la consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, reconocía que el actual Govern dedicaba más dinero a publicidad que a los temas de la mujer. «En Presidència no hay una sola mujer; en Hisenda, tampoco, y en Innovació i Energia, lo mismo. Está claro que en las consellerías del PSOE no hay mujeres en los puestos de responsabilidad», argumentó la diputada popular. Salom recordó que, en el caso de Formentera, donde sólo se elige a un diputado, no será posible aplicar la paridad. «Nosotros podemos ser un hombre o una mujer, pero será de Formentera», ironizó Santiago Ferrer entre los abucheos del PP.

Para finalizar el debate, Armengol calificó de «muy triste que la diputada del PP convierta un debate de estas características en un espectáculo de circo». «Es esperpéntico ver a lo que se agarran para criticar la ley», dijo Armengol, quien recordó que «la ley del divorcio también se aprobó sin los votos del PP, aunque muchos de sus dirigentes han hecho uso de esta ley».

Aprobada una deuda de 120 millones de euros para el temporal
El Parlament balear aprobó ayer, con los votos en contra del Pacte, el proyecto de ley que incrementa en 120 millones de euros el endeudamiento de los presupuestos autonómicos de 2002 para atender las ayudas por los daños causados por el temporal de noviembre, según informa Efe. Finalmente, en la última sesión plenaria del periodo de sesiones, el Govern logró que la Cámara diera el visto bueno de manera definitivo a esta ampliación de capital para hacer frente a las millonarias pérdidas causadas en Balears en noviembre de 2001. Durante el debate sólo intervinieron los representantes del PSIB-PSOE y del PP, y el diputado socialista Antoni Diéguez insistió en que este dinero servirá para atender las indemnizaciones, y sólo en caso de que sobrara alguna cantidad de estos 20.000 millones de pesetas se destinaría a crear un fondo de contingencia que servirá para realizar nuevas inversiones en las Islas.