El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares,
visitó ayer el Ajuntament de Palma junto con el senador autonómico
Manuel Cámara. Ambos acudieron a la concentración silenciosa que se
celebró al mediodía en Cort en repulsa por el último atentado
terrorista de ETA. Llamazares condenó sin paliativos el atentado y
pidió a los distintos partidos políticos que unan sus fuerzas para
luchar contra el terrorismo.
Por lo que respecta a otros temas de actualidad, Llamazares se
pronunció sobre la experiencia del Pacte de Progrés en Balears e
hizo una valoración positiva. «Con un núcleo de formaciones de
izquierda, el Pacte ha tratado de aplicar el programa posible, no
el programa máximo», dijo, para añadir: «Hay que reconocer que se
trata de una experiencia compleja, pero también positiva, en la que
ha sido necesario compartir varios programas. Indudablemente, se
están llevando a cabo políticas mucho más progresistas que las que
realizó el PP».
El coordinador de IU señaló que su agrupación está estudiando la
posibilidad de repetir esta experiencia de pactos progresistas en
otras comunidades autónomas, planteándose incluso aplicarla a nivel
del Estado. «Podría ser la alternativa al PP», dijo. Llamazares
habló de la necesidad de contar con una izquierda plural y señaló
que el PSOE ha de abandonar el centro político para volver a
situarse a la izquierda. Por lo que respecta a Palma, señaló que la
designación de Catalina Cirer como candidata a la Alcaldía por el
PP era una «jugada defensiva, al igual que la de Ruiz-Gallardón
para la Alcaldía de Madrid», afirmó, valorando también como
deseable la posibilidad de que se cree un Pacte de Progrés a nivel
de Ciutat.
Sobre la designación de Eduardo Zaplana como nuevo ministro de
Trabajo, señaló que su elección sólo obedecía a una política de
imagen del PP. «No supone un cambio real de política, Aznar está
intentando poner en marcha el programa conservador que tenía
guardado en el cajón desde 1996», indicó, y señaló que el
presidente del Gobierno «es un seguidor de la derecha americana».
En relación a la pasada huelga general señaló que había sido un
éxito. «La repercusión de la huelga ha sido enorme y ha provocado
la mayor crisis de gobierno que se recuerda en estos últimos años»,
destacó.
Sobre la actuación del Gobierno español en la crisis de la isla
Perejil Llamazares se mostró muy crítico. «Fue una actuación
esperpéntica, propia de una obra de Valle-Inclán», dijo. «Hace
falta una política de acercamiento hacia Hispanoamérica y es
necesario cambiar la relación que mantenemos con el norte de
Àfrica», concluyó.
Críticas a Aznar y a Matas por los casos Bitel y
Formentera
El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares,
también habló sobre el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas.
«Continuamos pidiendo a Aznar que asuma alguna responsabilidad
política por los casos Bitel y Formentera, si no tendrá que asumir
responsabilidades penales», dijo. «Espero que el presidente del
Gobierno no utilice al fiscal general para paralizar los
procesamientos y que éste no sea el parapeto para que estos casos
no sigan adelante», añadió. «El interés de Matas es lo opuesto al
interés público», concluyó.
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