Miquel Rosselló prometió el cargo de conseller

En un sencillo acto, en el que no estuvieron presentes todos los miembros del Govern, Rosselló dijo que llegaba a la Conselleria de Treball «muy tranquilo porque se ha hecho un gran trabajo y hay un gran equipo». Precisamente, todos altos cargos de Treball y la mayoría de directores generales de Benestar Social asistieron al relevo de Grosske por Rosselló. En representación del Govern estuvieron presentes Aina Salom, Celestí Alomar, Josep Maria Costa, Fernanda Caro, Mateu Morro, Príam Villalonga y Joan Mesquida.

El conseller saliente tomó la palabra y agradeció el trabajo realizado por todo su equipo. «Tiene mucho mérito la labor de mis compañeros porque ha sido mucho más callada que la mía», dijo Grosske. El ex conseller de Treball se dirigió a Antich, a quien calificó como su «amigo», y reconoció que había sido «un placer personal haber participado en el primer gobierno de progreso». «Se ha especulado mucho sobre mi relación con el president. Somos amigos y ha sido muy bonito participar en un proyecto político común y tener una buena relación personal», admitió Eberhard Grosske, quien prometió: «espero que en el futuro haya muchas posibilidades de firmar convenios con vosotros desde el Ajuntament de Palma». Grosske continuará como diputado y preparará su candidatura a Cort.

Por su parte, Miquel Rosselló mostró su satisfacción al poder participar «en un proyecto tan ilusionante». «Para mí es una gran satisfacción y supone una gran responsabilidad asumir este reto político, aunque en la Conselleria de Treball hay mucho trabajo hecho y los deberes están muy avanzados», afirmó el nuevo conseller. Para Miquel Rosselló, el trabajo de Grosske en Treball «ha sido excelente y supone una gran satisfacción para mí poder trabajar con su actual equipo». Rosselló reiteró que no hará ningún cambio en su staff.