El Consell de Mallorca pondrá en marcha el Institut Mallorquí de
Serveis Socials (IMSS) como paso previo al traspaso de competencias
de acción social desde el Govern al Consell previsto para el
próximo mes de junio. Dado que las competencias llegarán justo
después de las elecciones autonómicas del 25 de mayo, el Consell
quiere dejar cerrada la aprobación de este instituto en el pleno
del próximo mes de mayo, el último de la legislatura.
Si no se puede aprobar en este pleno, el traspaso podría
complicarse en caso de que el nuevo Consell de Mallorca todavía no
se haya constituido cuando lleguen las competencias.
La consellera de Serveis Socials del Consell, Josefina Sintes,
tiene prácticamente cerrado el acuerdo con los representantes de
los demás partidos políticos y de las fuerzas sindicales para poder
cerrar la aprobación de este instituto. La negociación está
pendiente de algunos flecos, como es la representación que tendrán
las distintas formaciones políticas en las futuros órganos de
dirección del nuevo instituto.
El Institut Mallorquí de Serveis Socials gestionará, todos los
temas relacionados con los servicios sociales. El propósito del
Consell con este nuevo órgano es agilizar la gestión de estos
problemas, que en su mayor parte requieren de una solución
inmediata. «No se puede tener a personas con problemas sociales
pendientes de las ayudas porque la gestión es lenta», señaló
Sintes.
En un primer momento, el nuevo instituto recibirá todas las
competencias del Institut Balear d'Afers Socials (IBAS), que
quedará prácticamente desmantelado. Con este traspaso, el Consell
tendrá un presupuesto de unos 30 millones de euros y recibirá más
de 400 funcionarios procedentes del Govern, con lo cual se
duplicará el personal dependiente de Serveis Socials.
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