«La libertad consiste en el derecho de todo individuo de poder
decir la verdad», dijo ayer Eduardo Bonnín, fundador de los
Cursillos de Cristiandad, en el acto de presentación de su libro
Historia de un carisma.
El acto, que se llevó a cabo en el salón de actos del colegio Sant
Francesc de Palma, contó con la presencia del autor de la obra,
Eduardo Bonnín, y el secretario diocesano de cursillos, Jesús Valls
Flores, y el presidente de la Fundación Eduardo Bonnín Aguiló,
Miquel Llabrés Feliu.
El vicario judicial y catedrático de derecho canónigo de la
Universitat de les Illes Balears (UIB), Antonio Pérez Ramos, fue el
encargado de presentar ayer el libro de Bonnín, inspirador del
movimiento católico de los cursillos de cristiandad que nacieron en
Mallorca, en el año 1944, y que actualmente se están realizando por
todo el mundo.
Bonnín, inagotable fundador seglar de cursillos presentó, a sus
86 años, el libro resumen de toda una vida impulsando con ideas y
experiencias evangélicas el movimiento de cursillos de cristiandad,
que han influido en que Mallorca sea conocida en todo el mundo.
En el libro se explica como, en 1944, en un chalet de Cala
Figuera, se realizó el primer cursillo concebido como especialidad
de la iglesia, cuyo objetivo primordial radica en la importancia de
la vocación laico-seglar para vivir la realidad evangélica en la
normalidad cotidiana, dándole un sentido trascendental a las cosas
cotidianas.
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