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«Con las obras de reforma aprobadas y que vamos a empezar en seguida, el puerto de Palma puede funcionar perfectamente hasta el 2010, siempre que no surjan otras cosas que hagan cambiar las previsiones», manifestó a Ultima Hora Joan Verger, presidente de la Autoritat Portuària, al explicar de manera pormenorizada los proyectos para los cuales el Ministerio de Fomento acaba de consignar las partidas presupuestarias para el 2004, que suman un total de 190.217.000 de euros, de los cuales, 14.269.000 euros son para el puerto de Palma, 405.000 para el de Alcúdia, 391.000 para el de Eivissa, 2.200.000 para La Savina (Formentera) y 1.220.000 para el de Maó.

Verger asegura que el crecimiento y la evolución del puerto de Palma «no depende únicamente de la Autoritat Portuària, sino que intervienen otros factores, como era el caso de la Copa América, que hubiera significado acelerar la reforma para adecuar el puerto a las exigencias de esa competición deportiva, que finalmente no ha sido necesario al ser descartada Palma como sede. Luego están otros condicionantes derivados de los proyectos de evolución de la ciudad, que también nos afectan directamente, porque el puerto forma parte de ella, y para ello tenemos que empezar a sentarnos, posiblemente la próxima semana, con los responsables de la Comunitat Autònoma y del Ajuntament. Luego tenemos que empezar a prepararnos para las Olimpiadas del 2012, ya que Palma opta a ser subsede para el deporte náutico».

A Verger le interesa conocer qué piensa hacer el Ajuntament de Palma con los proyectos o intenciones municipales de soterrar la calzada de la primera línea de la autovía hasta el paseo de Sagrera, y también la posibilidad de que la explanada del muelle comercial más próxima al casco urbano acoja una gran zona de ocio de la que tantas veces se ha debatido y para la que se llegó a celebrar un concurso de ideas al que arquitectos de toda España presentaron proyectos y maquetas, y del que nunca más se supo. «Si se traslada aquí la zona de ocio, habrá que trasladar a la zona del dique del Oeste toda la actividad de carga y descarga de mercancías, así como reparación y mantenimiento de embarcaciones, que por cierto es una actividad de gran futuro».

Asegura que «estamos abiertos a cualquier propuesta, siempre que se mantenga la premisa de que se trata de un puerto y se ha de garantizar su actividad que es la del tránsito de pasajeros, mercancias y cruceros, porque de nada me sirve a mí que aquí pongan bares, restaurantes y lo que sea pero que luego no se pueda hacer llegar la cerveza porque no hay espacio para las mercancías».

De lo que no tiene ninguna duda es de que a partir del 2010 el puerto de Palma deberá crecer de manera necesaria, «porque si cada año la actividad portuaria crece un cinco por ciento eso supone que dentro de seis años nos plantamos en el 25 por ciento de crecimiento y eso no lo podrá soportar la actual estructura portuaria de Palma».