La Policía Local de Palma realizó un total de 1.335 actuaciones
de este tipo, concentradas en las noches de los fines de semana,
con una media de 148 mensuales.
El mes en que los agentes vigilaron de manera más intensa el
nivel de ebriedad de los conductores fue enero, con un total de 214
controles, 44 de los cuales acabaron en denuncia por superación de
los límites de velocidad.
Por contra, el mes de agosto sólo 92 usuarios se vieron
obligados a «soplar» para someterse al control.
El objetivo de la Policía Local es mantener una media de unos
150 controles mensuales en el Passeig Marítim, si bien no se
descartan campañas específicas para intensificar la vigilancia del
tránsito rodado.
En cuanto a la dotación de agentes que patrullan de noche por la
zona los viernes y sábados, la regidora de Seguridad Ciudadana,
Teresa Giménez, prevé incrementarla, sobre todo en los puntos dónde
se concentran los asiduos a la práctica del «botellón».
Precisamente, el portavoz municipal de EU-EV, Eberhard Grosske,
afirmó que, entre los meses de junio y septiembre de este año, se
produjo un accidente de tráfico diario en el Passeig Marítim y
señaló que es significativa «la ausencia de controles de
alcoholemia» instalados por la Policía en esta zona.
Grosske afirmó en rueda de prensa que, entre el 1 de septiembre
de 2002 y el 31 de agosto de este año, se han producido 241
accidentes de tráfico en esta vía, alrededor de uno por cada tres
días, según datos proporcionados por el Ajuntament.
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