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Los grupos parlamentarios deberán decidir hoy si rechazan el «Plan Ibarretxe», tal y como propone el PP, o apoyan las fórmulas alternativas que han presentado PSOE y PSM. El Parlament debatirá el «Plan Ibarretxe» en un clima de máxima tensión política después de que la semana pasada los grupos no llegasen a un acuerdo para respaldar una declaración institucional a favor de la Constitución. Los distintos portavoces deberán pactar durante el debate de la proposición no de ley presentada por el PP si se consensúa un texto conjunto o, por el contrario, se aprueba la propuesta de los populares y se rechazan los textos alternativos de PSM y PSOE.

El portavoz del PP, Joan Huguet, manifestó anoche a este periódico que su grupo puede asumir el texto del PSOE, que no condena el Plan Ibarretxe, para que sea incluido en el preámbulo de su proposición no de ley. En cuanto al texto alternativo del PSM, los populares están dispuestos a incluir una transacción con los tres primeros puntos de la enmienda, pero no asumen el resto. El grupo nacionalista elude cualquier pronunciamiento sobre el «Plan Ibarretxe». «La mejor manera de defender la Constitución es el rechazo del Plan Ibarretxe», señaló ayer el portavoz del PP, quien espera que el resto de grupos apoyen su proposición no de ley. Desde UM ya han manifesto que se abstendrán en la votación. Los nacionalistas han justificado que siempre se abstienen cuando en el Parlament se tratan temas relacionados con la política nacional.

Por otro lado, el presidente del Parlament ha convocado para esta misma mañana la Junta de Portavoces para intentar consensuar una declaración institucional a favor de la Constitución similar a la pactada la semana pasada por los grupos municipales en Cort. Pere Rotger espera que, en contra de lo ocurrido la semana pasada, hoy sí haya acuerdo entre los distintos grupos. Hace siete días, el PSM no aceptó apoyar la declaración institución a favor de la Constitución para protestar contra Delegación del Gobierno.