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El absentismo escolar afecta principalmente a los alumnos de segundo de ESO, con un índice del 16,29% sobre el total de los estudiantes de este curso, lo que representa una diferencia considerable con los porcentajes que se alcanzan en el resto de niveles de Secundaria.

Esta es una de las principales conclusiones de un estudio elaborado por la Direcció General d'Ordenació, Innovació i Formació del Profesorat de la Conselleria d'Eduació sobre un total de 6.172 alumnos de 23 institutos y colegios concertados de Palma durante el pasado curso escolar.

Los resultados de este trabajo son básicamente orientativos, al no recoger más que los datos de algunos centros, pero su valor radica en que es el único estudio sobre absentismo con el que cuenta la Conselleria, reconoció la directora general d'Ordenació, Joana Rosselló.

Del total de alumnos que han participado en el análisis, de primero a cuarto de ESO, un 12,79% presenta situaciones de absentismo, es decir, «no acude a su centro educativo sin tener alguna circunstancia que lo justifique». El curso más afectado es segundo, con un 16,29%, seguido de tercero (12,04%), cuarto (11,97%) y primero (10,06%). Otro dato de que dispone la Conselleria, aunque no se refleja en este estudio, es que tras segundo de ESO, otro momento delicado en este sentido es el paso de curso de la Primaria a la Secundaria.

Joana Rosselló insistió en que «no se trata más que de un primer estudio sobre el absentismo escolar en la Comunitat, una base desde la que partir para elaborar análisis más completos y determinar las medidas que puedan contribuir a reducir esta problemática».

El análisis distingue entre tres tipos de absentismos: el esporádico (faltas de asistencia mínimas que se producen de forma ocasiona a lo largo de un trimestre), el intermitente (faltas de asistencia uno o más días durante diversas semanas) y el crónico, que es el más preocupante y que se da cuando el alumnos falta tres o mas días de la semana de forma reiterada o bien sólo asiste de forma ocasional al centro.

Atendiendo a esta distinción, el estudio indica que donde más casos de absentismo crónico se dan es en segundo de ESO y que el más alto número de absentistas de primero a cuarto de ESO se concentran en la categoría de absentismo esporádico.

La directora general reconoció que «por los datos recibidos del muestreo de centros que han participado podemos deducir que el absentismo está bastante relacionado con la zona en la que está ubicado el colegio o instituto», es decir, que se dan más casos en los centros de barrios más pobres que en los del centro de Palma.

La Conselleria ha remitido a los centros las Instrucciones para el curso 2004/05 por las cuales se regulan las actuaciones de éstos en relación al absentismo.

Las instrucciones contemplan la existencia de dos comisiones: de zona y de coordinación de casos, las cuales ya funcionan en municipios como Palma, Petra, Campos o Manacor. Desde la Conselleria se ha convocado también a las diferentes instituciones implicadas en materia de menores -ya se han reunido dos veces- a fin de articular actuaciones y establecer circuitos de derivación de los casos en función de las dificultades de su resolución.

Además, como medida de prevención se están llevando a cabo toda una serie de programas de intervención socioeducativa (talleres a los que acuden alumnos en situación de riesgo o social o absentistas durante unas horas al día) en colaboración con los ayuntamientos y en enero se ha puesto en marcha el programa de intervención Alter, que sustituye a los programas Dalias y Ulises.