El ex ministro de Exteriores Marcelino Oreja planteó ayer en Palma,
donde pronunció una conferencia con el título «Política y sociedad
en la Unión Europea», que hubiese sido «mucho más fácil aprobar la
Constitución Europea por la vía parlamentaria». Oreja, quien
también ocupó el cargo de comisario europeo y tiene una amplia
experiencia en política comunitaria, hubiese preferido la via
política en lugar del referéndum para aprobar el Tratado
Constitucional.
Antes de comenzar su conferencia, y en un encuentro con
periodistas, Oreja admitió que la Constitución es un documento
«complejo y difícil para que sea comprendido con detalle por los
españoles que han sido llamados a votar el día 20». Oreja recordó
que en caso de que algunos de los 25 miembros de la UE no ratifique
la Constitución, existe la posibilidad de sacarlo adelante si al
menos 20 países la avalan.
El ex ministro destacó que la Constitución Europea recoge una
carta de derechos fundamentales ligados a los ciudadanos europeos
frente a tratados anteriores, que no hacían ninguna mención a a
estos derechos. «Ha habido una avance», asumió. Asimismo, Oreja
subrayó que dicha carta de derechos fundamentales destaca la
condición de la UE como un ente político equivalente «a un estado
de derecho». «En la Constitución hay una clarificación de las
competencias», dijo.
Marcelino Oreja es licenciado en Derecho por la Universidad de
Salamanca, fue nombrado ministro de Exteriores en 1976 y en 1989
fue elegido eurodiputado. Hace dos años, Oreja fue nombrado
comisionado del Gobierno para coordinar las ayudas por el
«Prestige».
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