TW
0

La escasa participación en el referéndum de ayer fue para casi todos los partidos -salvo para UM, que pasó sobre ascuas por este dato- el hecho más «preocupante» que dejó la consulta popular en Balears y casi todos sus portavoces aludieron a este asunto en sus declaraciones. El propio president Jaume Matas lamentó la baja participación y asumió una parte de responsabilidad, en tanto que dirigente de uno de los partidos que habían apostado por el sí. Según el president sería un «error» plantear una «batalla de responsabilidades» sobre el bajo porcentaje de participación obtenido en la Comunidad Autónoma, en la que sólo votó un 33'27 por ciento de la población censada, e insistió en que este hecho se debe al modo en que el Gobierno central ha convocado el refrendo y a que los partidos que han hecho campaña a favor de una u otra opción no han sabido interesar a los ciudadanos. Casi todos los tópicos cayeron anoche en las sedes de los partidos. Nadie habló de «noche larga», nadie temió por un «vuelco» en el último momento y, desde luego -salvo en UM- la presencia de militantes en las sedes fue escasísima.

María Antònia Munar, de UM, fue la primera en valorar los resultados. Quizá por eso, o porque se centró en una lectura en clave estatal, celebró «el éxito» de participación, aunque fue la más baja de España. La presidenta de UM, ante una sede abarrotada de militantes (pese a no tener interventores en ninguna mesa, decenas de personas se fueron congregando a partir de las ocho en el partido, donde se sirvió cena) dijo que «somos un poco más europeos» y recordó que su formación fue la primera de Balears que apostó por el «sí». Acompañada por la plana mayor de su partido, Munar celebró el triunfo de sí como si UM hubiera ganado unas elecciones y Tomeu Vicens destacó que la presencia de militantes, «muestra del talante de nuestro partido ante la Constitución europea». En las sedes de los otros dos partidos del «sí», el PP y el PSOE, la alegría no era desbordante. Algunos cargos siguieron los primeros resultados en la sede del PP por televisión en una sala en las que se habían dispuesto unas viandas para los interventores y apoderados. Sobraron bocadillos en la sede del PSOE. El ambiente no tenía nada que ver al de anteriores convocatorias. Miquel Mestre, el secretario de Organización, se encargo de las valoraciones a los medios de comunicación. El secretarario general del partido, Francesc Antich, ocupó un discreto segundo plano (Francina Armengol siguió el resultado desde Ferraz) y aprovechó la calma que se respiraba en la sede para preparar con la diputada Bel Oliver la actividad parlamentaria de la próxima semana.

Miquel Mestre destacó la importancia del triunfo del sí y mantuvo que la participación siempre está en Balears por debajo de otras comunidades. Mestre se preguntó que «dónde estaban los interventores del PP», dando a entender que los populares se habían movilizado poco en esta campaña. La sede de Esquerra Unida se vacío pronto. La noche empezó con problemas técnicos: fallaba el televisor y la imagen iba y venía. Miquel Rosselló consideró «muy preocupante» la escasa participación pero destacó el «significativo peso del no». Miquel Rosselló, acompañado de otros dirigentes y militantes como Manuel Cámara o Pep Valero, indicó que tanto PP como PSOE habían apostado por una campaña de perfil bajo. «Que se vaya preparando Zapatero porque ahora el PP utilizará este asunto contra él», dijo. Los otros dos partidos del «no», ERC y PSM, también aludieron a las abstención. Para Joan Lladó, «la abstención remarca nuestro hecho diferencial». El secretario general del PSM, Biel Vicens, aseguró que el rechazo y la alta abstención registrados en las Islas en el referéndum para la Constitución europea reflejan que es necesario «corregir el rumbo del proceso de construcción europea» y dirigirlo hacia una mayor participación. Vicens lamentó la abstención del 66'27 por ciento del electorado balear en esta consulta popular, la cual achacó a «la información deficiente» que se ha dado sobre el Tratado constitucional y a la «manipulación» de la misma ejercida por los partidos mayoritarios, PP y PSOE, durante su campaña por el referéndum. La Coordinadora Por el No ha dejado para hoy las valoraciones sobre la consulta.