En 2015, las aguas superficiales y subterráneas deben haber
recuperado su buen estado cuantitativo, ecológico y químico, según
la Directiva Marco del Agua (DMA) de la Unión Europea, de obligado
cumplimiento.
Barón indicó que «la DMA establece excepciones en el cumplimiento
del plazo, año 2015, para recuperar la calidad de las aguas, pero
en Balears no es previsible que haya casos excepcionables o
prorrogables».
En definitiva, aguas superficiales y subterráneas deben
presentar unos mínimos de calidad en esa fecha. Así lo explicó ayer
Alfredo Barón, jefe de Estudis i Planificació de la Direcció
General de Recursos Hídrics, de la Conselleria de Medi Ambient,
durante su ponencia «Recursos Hídricos y Directiva Marco del Agua
en Balears», con la que concluyeron las Jornadas sobre Demanda y
Consumo de Agua en el Dominio Mediterráneo, organizadas por eClub
Ultima Hora y la Fundación Ramón Areces.
Hasta entonces, las Administraciones competentes (en Balears, la
Conselleria de Medi Ambient) deben presentar identificaciones de
presiones e impactos sobre las aguas (intrusión marina y
salinización, contaminación por nitratos, vertidos de aguas
residuales, filtraciones de hidrocarburos en los núcleos urbanos,
etc.), análisis económicos de los usos del agua, coste de los
servicios de gestión e infraestructuras, recuperación de costes a
través de las tarifas y listados de zonas sensibles a proteger.
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