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Estudios científicos de Claudia Mills, de la Universidad de Washington, del Centre de Recuperació d'Animals Marins (CRAM) de Premià (Barcelona) y de los investigadores catalanes Rafel Simó, Josep Maria Gasol y Josep Maria Gili, establecen el factor humano como uno de los causantes de la proliferación de medusas en mares y océanos, y en concreto en el Mediterráneo occidental, tal como se ha comprobado este verano en Balears y Catalunya.

La revista «Nat» recoge los resultados de estos estudios. Evidentemente, existen causas naturales de la irrupción masiva de medusas. En el Mediterráneo, abundan en mar abierto, a una distancia de entre 10 y 40 millas de la costa, con una mayor producción biológica. Especialmente a principios de verano, las medusas llegan a las playas, arrastradas por vientos y corrientes.

También los inviernos secos y las primaveras poco lluviosas, como ha ocurrido en 2005, son apuntados por Josep Maria Gili como factores de incremento de presencia de medusas en verano. Todo ello se correspondería con ciclos naturales que se repetirían cada once o doce años. Sin embargo, los científicos observan que, desde los años 80, los ciclos son más cortos y se repiten con mayor frecuencia.

Aquí intervendrían los factores humanos, que incidirían en la disminución de los predadores naturales de las medusas: las tortugas marinas, algunos tipos de moluscos y peces como el atún y ebot.

El CRAM calcula que sólo en el Mediterráneo occidental se pescan accidentalmente unos 20.000 ejemplares de tortuga careta al año con la técnica del palangre. Otras causas de la regresión de las tortugas son la pérdida de playas donde poner los huevos, la erosión de la costa por su urbanización y otras técnicas pesqueras como el arrastre.

Pero no sólo han disminuido los predadores de las medusas. También lo han hecho sus competidores directos, los peces, por el mismo alimento, principalmente pequeños crustáceos. Así, la sobrepesca o sobreexplotación de los recursos pesqueros favorece la expansión de las medusas en aguas mediterráneas.