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El empresario salmantino y presidente del grupo Globalia, Juan José Hidalgo, invertirá más de 120 millones de euros en la localidad malagueña de Estepona, en unos terrenos en los que el obispo de Mallorca, Teodor Úbeda, fue albacea testamentario de la Fundación Nadal y que le supusieron varias demandas por entidades crediticias por pagarés firmados por Úbeda al quebrar la empresa encargada de mantener los terrenos.

El propio Hidalgo ha señalado durante estos días que va a cumplir a ratajabla todos los convenios que se van a firmar, que permitirán la construcción de una zona turística, con un hotel de cinco estrellas y un campo de golf, así como otra residencial y de servicios, que incluirá una universidad, un centro deportivo y un hospital. «Ha sido una inversión muy pensada a lo largo de 14 meses y la he hecho a título personal, porque voy a invertir las plusvalías generadas por la venta de parte de mis acciones de Globalia al Banco Popular y a Unicaja. En esta operación no tiene nada que ver el grupo Globalia, puesto que la he hecho a título personal a través de empresas mías que he creado para desarrollar este proyecto».

Fuentes próximas a Hidalgo indican que el empresario «estaba al corriente de esta problemática, pero consideró una buena oportunidad de negocio invertir aquí, para lo cual negoció con todas las partes, incluso con la Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Estepona, entidades financieras y el albacea de la Fundación Nadal, el alcalde de Estepona, Antonio Barrientos».