Expertos y arquitectos coincidieron ayer en afirmar que el futuro
del plan de renovación integral de la Platja de Palma pasa por
«dotar de las competencias urbanísticas y jurisdiccionales al
consorcio de este proyecto, porque en caso contrario será
inviable», según afirmaron ayer en el transcurso de la segunda
sesión de las IV Jornadas sobre Ordenación del Territorio, que
finalizaron ayer en el Col.legi de Arquitectes de Balears.
El arquitecto Manuel Ayollón Campillo, medalla de plata de
Urbanismo de la Comunidad de Madrid, insistió en que la creación de
un consorcio urbanístico será la mejor manera de conseguir que los
ingresos que se generen reviertan en la zona y de evitar retrasos.
«La falta de capacidad operativa provoca que un año después de su
creación el consorcio de la Platja de Palma no haya iniciado
ninguna actuación. Las diferentes administraciones deberían ceder a
este ente las competencias urbanísticas de manera puntual, pero
para ello se necesita voluntad política», afirmó.
Por su parte, en relación a la polémica planteada con la
reconversión de plazas hoteleras en viviendas, el presidente de la
Agrupación de Promotores Inmobiliarios de Balears, Gabriel Oliver,
dejó claro que se deben de hacer planes especiales y que «habrá
edificios que se tendrán que demoler y convertir en equipamientos o
zonas verdes, pero no todos tienen que reconvertirse en viviendas,
porque es perpetuar algo que no nos gusta».
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