Eso significa, de entrada, que aquellos ciudadanos que salgan en
la lista y decidan ahora lo que deben a Cort tendrán que abonar los
intereses que se hayan producido por retrasos en los impagos.
Fuentes del Ajuntament de Palma y de la Conselleria d'Economia i
Hisenda, encargada de hacer la recaudación, explicaron que cabe la
posibilidad de que Cort ordene incluso el embargo de determinados
bienes en caso de que el moroso sea recalcitrante. El embargo puede
afectar a sus bienes, ya sea el automóvil, las cuentas corrientes o
incluso las propiedades inmobiliarias.
Las mismas fuentes señalaron que estas deudas de los ciudadanos
corresponden a impago de multas de tráfico y multas de
aparcamiento. También se pone al cobro ejecutivo los impagos del
Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto de Actividades
Económicas (IAE) y la tasa de incineración. Los casi 120.000
ciudadanos que figuran en la lista publicada ayer por el Butlletí
Oficial acumulan un deuda total que supera los 8'5 millones de
euros. Las previsiones que ha realizado el Ajuntament es que, de
esta cantidad total, la mitad corresponde a impagos del Impuesto de
Bienes Inmuebles o del IAE.
La recaudación voluntaria de estos dos impuestos acaba de
finalizar y por eso quienes no lo han pagado a tiempo pasan ahora a
la vía ejecutiva, en la que tendrán que abonar los intereses. A
pesar del abultado volumen de morosos, en la lista no están todos
los que son. Es decir, que el conseller advierte de que saldrán
nuevas listas de morosos en próximas ediciones del BOIB. Ello se
debe a que en el listado aparecen morosos de distintos ejercicios y
distintos conceptos.
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