03/12/05 0:00
TW
0

NEKANE DOMBLÀS/JOSEP M. AGUILÓ
Ni el Rey se salva de la quema. Don Juan Carlos es uno más de los 120.000 ciudadanos que tienen alguna deuda con el Ajuntament de Palma: figura en dos ocasiones en la lista de morosos de Cort que ahora busca el Govern para hacer efectivo el pago. ¿La razón? El impago de los impuestos de circulación de 2005 correspondientes a dos motos de la marcas Yamaha y Aprilia. Don Juan Carlos debía pagar 7,84 euros por cada una de las motos entre el 1 de marzo y el 30 de abril de este año pero el pago no se hizo efectivo. El teniente de alcalde d'Hisenda i Funció Pública del Ajuntament de Palma, Pedro Alvarez, confirmó que el recibo de los dos impuestos llegó al Palacio de Marivent, pero no se obtuvo respuesta. Así que, como otros 120.000 ciudadanos, quedó incluido en el listado de morosos que tienen cuentas pendientes con el Ajuntament. Ahora es el Govern quien le busca para que pague la multa.

Don Juan Carlos deberá cumplir el mismo trámite que el resto de ciudadanos que tienen alguna cuenta pendiente con el Ajuntament: desde que la lista de morosos se publicó en el Butlletí Oficial de les Illes Balears (el pasado 30 de noviembre), el Monarca dispone de 15 días para pagar el total de 15,68 euros que debe al Ajuntament de Palma. Se le aplicará además un recargo de entre el cinco y el diez por ciento y también se le cobrarán los intereses de demora por no haber pagado en el plazo estipulado.

Si el pago no se formaliza en el plazo correspondiente, se le aplicará un nuevo recargo del 20 por ciento, al que también se sumarán los intereses. Ni siquiera aquí acaba el proceso ya que si persiste en el impago, el Govern puede incluso ordenar una providencia de embargo, que afectaría a sus cuentas corrientes, los vehículos de su propiedad y hasta sus bienes inmuebles. Si todo el proceso administrativo se complica y se prolonga por espacio de más de cuatro años, el Rey no deberá pagar ni el impuesto ni los recargos ya que todo el procedimiento habría prescrito. Y lo mismo sirve para el Rey que para otros 120.000 ciudadanos.