El Govern exige asumir la gestión de Cabrera con el centro de interpretación de la Colònia

Sin embargo, el principal escollo para alcanzar un acuerdo entre las dos administraciones sigue siendo el traspaso del centro de interpretación de Cabrera que se construye en la Colònia de Sant Jordi. El Govern exige asumir este centro que todavía no está en funcionamiento y quiere el dinero necesario para financiar su mantenimiento. El Ministerio de Medio Ambiente considera que este centro no forma parte del Parque Nacional que, por sentencia, tiene que transferirse a la Comunitat Autónoma. La Conselleria de Medi Ambient quiere 1,5 millones de euros anuales para abonar el mantenimiento del centro de interpretación de la Colònia de Sant Jordi.

El centro mostrará y explicará el medio marino, terrestre e incluso arqueológico (reproducciones de pecios) de Cabrera mediante acuarios (con 700.000 metros cúbicos de agua de mar, siempre reflejando la realidad biológica del Parc), recreaciones y audiovisuales. Sobre una parcela de 3.000 metros cuadrados, la instalación contará con unos 2.500 construidos rodeados de jardines y será el mayor centro de interpretación de Europa. El centro podría haberse inaugurado el próximo verano, pero parece que habrá un cierto retraso.

A la reunión del día 11 acudirán representantes de la Conselleria d'Hisenda para negociar la cantidad económica que cada año deberá abonar el Ministerio de Medio Ambiente para la gestión de Cabrera. En este sentido, desde el Ejecutivo autonómico resaltaron que todavía no existía un acuerdo definitivo y que había diferencias entre lo que ofrecía el Ministerio de Medio Ambiente y lo que quería el Govern.

El traspaso de Cabrera a la Comunitat Autónoma supone dar cumplimiento a la sentencia 194/04 del Tribunal Constitucional por la que se establece que la gestión ordinaria de los parques nacionales corresponde a las comunidades autónomas, así como que, de hecho, ya se constituido la ponencia técnica para llevar a cabo el cambio de gestión. El conseller de Medi Ambient, Jaume Font, ya expresó hace dos años su preocupación por la demora en asumir la gestión de Cabrera. Sus temores se han confirmado.