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Ayer por la mañana, lo primero que hizo nada más llegar a la playa el ex ministro -y 'azote' del PSOE- Acebes fue tomarse un agua y devorar la prensa en lo que su esposa se acomodaba en la hamaca, frente al mar. Lo segundo, estrechar la mano a Alfredo Sáez, del que se dice que es el bancario mejor pagado de España -7,5 millones de euros al año, publicaba un diario semanas atrás-, por ser consejero delegado del banco de Santander y mano derecha de Emilio Botín, un banquero, dicho sea de paso, de largo recorrido a través de las cumbres de la banca.

Alfredo Sáez había llegado minutos antes a la playa, habiendo dejado estacionado su todoterreno plateado en el párquing. Vestía pantalón verde, camisa blanca, sombrero de paja y bolsa de color rojo colgada del hombro. Tras apretar la mano del ex ministro, charló un rato con él y su acompañante, y luego se encaminó hacia su hamaca.

A todo esto apareció por allí el ex presidente del Barça, Núñez, con su esposa. Al pasar por donde estaba Acebes, que seguía devorando la prensa, ni se percató de su presencia, o si se percató ni le saludó. Se sentó en su hamaca y al rato se zambulló en el agua. Mientras tanto, en Palma, sigue «lo» del edificio GESA, adquirido por su empresa, Nuñez y Núñez, sin resolverse. ¿Qué pensará de ello Nuñez?

Pedro Prieto