Si en el año 1999 había en Balears 9.443 empresas dedicadas a la construcción, en el año 2005 ya sumaban 14.300 (un 51,4% más), según datos del INE. Un aumento similar se detecta en el número de trabajadores de este sector que, en el mismo periodo, ha pasado de 48.000 a 70.500, un 46,9% más. El auge de este ramo supera con creces la media de Balears, tanto en lo que concierne a compañías creadas, que han aumentado un 29,6%, como empleados, que han crecido un 28%.
En el mismo periodo, en cambio, el crecimiento experimentado por los servicios, con mucho más peso en la economía balear, ha sido muy inferior. Las sociedades dedicadas a este ramo se han incrementado un 28,1%, pasando de las 52.519 del año 1999 a las 67.309 de ahora. El número de empleados ha seguido un crecimiento similar, de un 30,5%. A principios de la década este sector ocupaba a 257.000 personas mientras que ahora emplea a 335.400. Con todo, los servicios continúan siendo el ramo de la economía con más empresas y empleados.
Las causas que explican el auge de la construcción en esta década son diversas y van desde la necesidad de invertir en «ladrillo» que provocó la llegada del euro, a la mayor presión constructora que generó el levantamiento de las moratorias. Todo eso, sin despreciar el incremento de obra pública, sobre todo de carreteras, que, por otra parte, ha hecho atractiva la construcción de viviendas.
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