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El 25 de octubre de 2002, el entonces teniente de alcalde de Infraestructures, epopular José María Rodríguez, siendo alcalde de Palma epopular Joan Fageda, dio a conocer que el Consistorio tenía la intención de poner en marcha durante la siguiente legislatura -es decir, en la actual- un nuevo eje verde en Ciutat, denominado Parc Central, que estaría integrado por el Parc de ses Estacions, el Parc de Son Costa y el Parc de Son Fuster. El Parc Central estaría delimitado por dos grandes paseos peatonales, uno situado en la calle Jacint Verdaguer y otro en la calle Eusebi Estada. Rodríguez indicó también entonces que si finalmente se llevaba a cabo el soterramiento de las vías del tren, podría crearse un bulevar en Jacint Verdaguer.

La propuesta del Parc Central fue recogida en el programa con el que la entonces candidata y hoy alcaldesa de Palma, la popular Catalina Cirer, se presentó por vez primera a la Alcaldía en las elecciones del 25 de mayo de 2003.

El 4 de marzo de 2004, el presidente del Govern, epopular Jaume Matas, y la propia Cirer presentaron el proyecto de soterramiento de las vías del tren, que preveía también la construcción de la Estación Intermodal, la segunda remodelación del Parc de ses Estacions, que pasaría de 36.000 a 54.000 metros cuadrados, y la creación de un bulevar peatonal de 18.000 metros cuadrados en el centro de la calle Jacint Verdaguer, que conectaría ses Estacions con el Parc de Son Costa y el de Son Fuster.

El 14 de septiembre de 2004, el teniente de alcalde de Urbanisme, epopular Javier Rodrigo de Santos, anunció que el bulevar peatonal previsto meses atrás en el centro de Jacint Verdaguer no se situaría ya allí, en donde se ubicarían cuatro carriles de circulación, sino primero en el lado izquierdo, con una amplitud máxima de 15 metros, y luego, mediante un paso de peatones, en el derecho, con una amplitud máxima de 10 metros. De este modo, la zona peatonal pasaría de 18.000 a 28.000 metros cuadrados, y la calzada tendría 15.000 metros cuadrados. Asimismo, se crearía un carril bici. El bulevar ya no llegaría hasta Son Fuster, sino sólo hasta Son Costa, y se crearía una rotonda a la altura de la calle Prevere Rafael Barrera, para favorecer el desvío del tráfico hacia Eusebi Estada, y una zona verde.

En mayo del pasado año, el entonces regidor de Trànsit i Transports y hoy teniente de alcalde de Seguretat Ciutadana, epopular Àlvaro Gijón, indicó que el equipo de gobierno había decidido realizar diversos cambios sobre el proyecto previsto ocho meses atrás en la calle Jacint Verdaguer tras escuchar a diferentes entidades vecinales de la zona, que pedían un lugar donde los residentes pudieran aparcar sus vehículos. De cuatro carriles de circulación previstos se pasaría finalmente a tres, dos de salida de la ciudad y uno de entrada, cada uno con tres metros de ancho. De este modo, podría haber a cada lado de la calzada un espacio de dos metros para que pudieran aparcar en él los coches que lo deseasen en cordón. Asimismo, habría dos carriles bus en la calle Aragó, uno de subida y otro de bajada, por los que sólo podrían circular los autobuses y los taxis, y se rediseñaría la zona verde prevista en Son Fortesa, y se instalarían parques ajardinados en la zona peatonal que habrá a la izquierda y a la derecha de Jacint Verdaguer.

La Plataforma pel Parc de les Vies, que preside Àngels Fermoselle, considera que este proyecto incumple el anunciado por el PP en 2002 y 2003, y afirma que Jacint Verdaguer pasará a ser en realidad una autopista y que además no se resolverá y se agravará el problema del tráfico en calles adyacentes como Eusebi Estada o Aragó.

El proyecto que defiende la plataforma, el del Parc Central, conectaría el Parc de ses Estacions con el Parc de Son Fuster, y además permitiría la unión del Parc Central con el Parc de Son Costa a través de un corredor o 'brazo' verde. Entre los equipamientos previstos en dicho proyecto estarían un pequeño museo ferroviario, un huerto didáctico de hortalizas, un itinerario cultural de la obra del arquitecto Gaspar Bennàssar, un quiosco de refrescos, una sala de exposiciones, un pequeño jardín botánico, ocho zonas de columpios, dos espacios de juegos de mesa, un 'pipican', varias pérgolas, dos pistas deportivas, un espacio circular para música o teatro y dos pistas de petanca.

El equipo de gobierno considera que este proyecto no es viable, porque afirma que contravendría una de las propuestas principales recogidas en el plan de movilidad elaborado la pasada legislatura por el Ajuntament de Palma, la de descongestionar de tráfico calles como Aragó o Eusebi Estada, por lo que entiende que algunas barriadas saldrían perjudicadas y otras beneficiadas, argumento este último que siempre ha negado la plataforma.