El ministro Joan Clos y el president Jaume Matas mantuvieron ayer una reunión en la sede del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.

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OLGA QUINTANILLA-MADRID
El president del Govern, Jaume Matas, alcanzó ayer en Madrid un compromiso del titular de Industria, Turismo y Comercio, Joan Clos para que a principios de 2007 se firme la creación del futuro Consorcio Urbanístico del Plan de Reconversión Integral de la Platja de Palma. El ministro Clos se trasladará hasta Palma de Mallorca para firmar, con el resto de las instituciones implicadas, la constitución del nuevo consorcio con las medidas urbanísticas necesarias para la adjudicación y ejecución de las 100+1 medidas y los acuerdos de financiación necesarios que cada administración deberá asumir según su ámbito de competencias. «Tenemos voluntad y concreción tanto por parte del ministro como por mi parte de llevar a cabo este proyecto, pues creemos que es muy importante realizar todo de una forma consensuada», dijo el president.

El president señaló que el requisito previo de este proyecto se centra en la adaptación del consorcio a las 100+1 medidas aprobadas en julio. «Existe una voluntad completa y absoluta de llevar a cabo este proyecto de reforma, dando por buenas las medidas que se presentaron en su día», afirmó Matas. Y dejó claro que se necesita un consorcio, que además de tener la implicación de todas las administraciones, «tenga un grado de competencias al menos de ejecución y desarrollo, sobre todo en cuanto a normativa urbanística que permitan la ejecución de estas medidas, aunque luego la aprobación de estas medidas correspondan a las autoridades competentes. Se trata de que una vez constituido el consorcio se puedan ejecutar dichas medidas y conseguir la financiación adecuada».

La firma de este gran acuerdo viene precedida también por el compromiso formal del Estado, en boca de Clos, de aportar un 33% a este proyecto, porcentaje similar al que aportará el Govern, así como el 11% que será sufragado respectivamente por las tres restantes administraciones implicadas, el Consell de Mallorca y los ajuntaments de Llucmajor y Palma. Lo que todavía no es definitivo es la inversión de unos 100 millones de euros calculada inicialmente. El día que se constituya el consorcio, explicitarán el acuerdo y la implicación de todas las administraciones. «No descarto que el presupuesto se pueda ampliar», afirmó. Asimismo, aclaró que a parte de hacer el balance final de la financiación en cuanto a las necesidades de inversiones, «una vez descontadas las infraestructuras que correspondan a cada administración y también los rendimientos que se puedan sacar desde el propio consorcio, que habría que descontar a esa necesidad de financiación, el saldo resultante es el que tendríamos que asumir entre todas las administraciones».