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JOAN J. SERRA Un centro de referencia internacional para la investigación y la formación medioambiental. Estas palabras, expresadas ayer por la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y por la presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol, definen la futura función de la finca pública de Raixa, objeto de una restauración todavía no concluida, pero suficiente para que en 2008 entidades como la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, la Universitat de les Illes Balears, la Fundación Biodiversidad (dependiente del Ministerio de Medio Ambiente), Europarc (ONG que agrupa a los parques nacionales y naturales del continente) y el propio Consell de Mallorca trasladen delegaciones a este histórico edificio para la organización de cursos, seminarios, conferencias o reuniones de comités científicos.

En el caso de Europarc, trasladará su sede central de Bonn (Alemania) a Raixa y el Consell de Mallorca creará un museo etnográfico.
La inauguración oficial de Raixa como centro público medioambiental tuvo lugar ayer en un acto que contó con unos 200 invitados y que fue presidido por Narbona y Armengol como responsables máximas de las instituciones titulares de la finca, el Ministerio de Medio Ambiente y el Consell de Mallorca. También asistieron el president del Govern, Francesc Antich; la presidenta del Parlament, Maria Antònia Munar, y el alcalde de Bunyola (municipio al que pertenece Raixa), Jaume Isern. Entre los invitados se encontraban numerosos representantes de la vida política, económica, social y cultural de Balears.

Como se recordará, las casas de Raixa y sus 52 hectáreas fueron compradas en 2002 por el Ministerio de Medio Ambiente y el Consell de Mallorca por 8'4 millones de euros. La restauración llevada a cabo desde julio 2005 ha costado 14 millones de euros y afecta a 2.000 de los 3.000 metros cuadrados construidos de las casas. Esta inversión ha sido asumida íntegramente por la Fundación Biodiversidad, que añadirá 10 millones de euros para la restauración de los mil metros cuadrados restantes de las casas y la rehabilitación de los famosos jardines de la finca. En total, cuando finalice, la inversión en la restauración de Raixa habrá ascendido a 24 millones de euros
No será hasta que la rehabilitación de los jardines haya concluido que Raixa abrirá sus puertas a las visitas públicas, tal como obliga su condición de Bé d'Interès Cultural. Concretamente, las visitas públicas permitirán el acceso al molino, la antigua capilla, los famosos jardines y su no menos conocida escalinata. El resto corresponderá a las oficinas y dependencias de los organismos citados, por lo que no se abrirán al público.