El Ala 15 del Ejército del Aire, equipado con aviones F-18, opera desde la base aérea de Son Sant Joan. Foto: PERE BOTA/G. ALOMAR

TW
0
GABRIEL ALOMAR Una escuadrilla compuesta por seis aviones cazabombardeos F-18 Hornet pertenecientes al Ala 15 del Ejército del Aire con base en Zaragoza, participó ayer en el ejercicio de defensa aérea Dapex-07 desde la base de Son Sant Joan. Estas maniobras, consideradas las más importantes realizadas por la aviación militar en el ámbito nacional, se efectúan en coordinación con otros efectivos de Albacete, Morón y Torrejón y reúnen a un total de 79 personas en Mallorca, entre ellos 14 pilotos, entre los más cualificados dentro de su especialidad.

A las 09.00 de la mañana, la escuadrilla activó la ignición de sus turbinas para emprender el vuelo, en el marco de un simulacro de guerra que involucra a toda la Península y Balears. El conflicto parte del supuesto de que un país democrático, 'Blueland' ,se ve obligado a intervenir contra otro de corte totalitario, 'Opforland', que ha invadido el territorio neutral de Albacete.

El dispositivo de defensa tiene por objetivo, según indicó el teniente coronel Luis Guillamón, jefe del destacamento del Ala 15, el evaluar las capacidades y carencias del arma aérea ante la eventualidad de una crisis real en el ámbito nacional o internacional. La operación contempla dos fases, una inicial de defensa y otra posterior de ataque, para cuya misión cuenta además con el apoyo de unidades del Ejército de Tierra y la Armada, así como la participación de países aliados, como Italia y Portugal.

Se da la circunstancia de que en caso de alerta, indicó Guillamón, una escuadrilla similar se encuentra en disposición de levantar el vuelo en unos minutos para acudir en defensa de cualquier punto del territorio nacional.

El cazabombardeo F-18, de origen norteamericano, data de finales de los años 70 aunque no fue adquirido por las Fuerzas Armadas hasta 1986 . A lo largo de estos veinte años ha sufrido diversos programas de modernización a nivel operativo e informático. Dotados con un versátil equipo armamentístico aire-aire y aire-superficie, que incluye artillería convencional, misiles infrarrojos o radaricos y bombas inteligentes, estos aparatos alcanzan una velocidad punta de 2.200 kilómetros por hora, con una autonomía de 2.425 kilómetros y un techo de más de 15.000 metros.