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«La vida se puede vivir mucho más fácil de lo que uno cree. Muchas veces transitamos caminos muy complejos para llegar a la conclusión de que se trata de ser honesto con uno mismo y regirse con el corazón». Esta es una de las reflexiones que ha realizado Adriana Wortman, astróloga y cabalista, que el próximo martes presentará su último libro 'Diálogo con la Luna'. No obstante, esta obra, que inicia la colección Diamantes de Da Vinci Continental, ya se puede adquirir en las librerías de la Isla.

Wortman explica que esta guía astrológica «está orientada al autoconocimiento, espiritualidad y fundamentalmente a la consciencia».
Este trabajo marca una diferencia con el enfoque convencional de la astrología, que cree que el destino está escrito, y opta por un enfoque en el que «desde la comprensión de los movimientos astrológicos cada persona pueda tomar consciencia y utilizar herramientas para aprovechar al máximo esas energías y cambiar eventualmente lo que podría ocurrir si uno no está consciente». 'Diálogo con la Luna' no fija un destino sino que anima a los lectores a coger las riendas de su vida.
Esta publicación tiene un carácter anual. En concreto, se publica desde el año 2005 y ofrece los pronósticos para el año en cuestión.
La prestigiosa astróloga y cabalista desvela que «este final de 2007 está siendo muy heavy», ya que se está produciendo el ingreso de Plutón en Capricornio, «que es uno de los movimientos más importantes de la década y que marca una transformación a nivel global». En este sentido, argumenta que existe la necesidad de transformar las estructuras, es decir, las leyes, el sistema financiero, político, educativo y gubernamental. «Este movimiento afecta a nivel colectivo e individual. Las personas estamos necesitando revisar muchísimo la forma de pensar, ya que el 99 por ciento pensamos en términos de polaridad y esto es lo que conduce a los enfrentamientos». Además, adelanta que 2008 es un año de desafíos.

Orígenes
Wortman se animó a escribir 'Diálogo con la Luna' debido a la petición que le realizó una de las alumnas que asistían a la reunión mensual del grupo de mujeres, que se reunían cada luna nueva, y que se fue a vivir a México. «Me dijo que tenía que escribir un libro para que ella pudiese enterarse de que iba a pasar, ya que no podría asistir a las reuniones. Me insistió tanto, que me animé y lo escribí».

Esta astróloga y cabalista dirige y coordina las actividades de su Centro que ella misma fundó en Palma.