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las 13.30 horas de ayer el reloj del Ajuntament de Palma marcaba las 12.45 horas. «Al limpiar el reloj el personal de limpieza ha debido de parar el péndulo. Tiene fácil solución», afirma Pere Caminals, relojero que desde hace tres años se encarga de que en Figuera no sufra desajustes y funcione a la perfección. El reloj se encuentra en la parte superior del edificio municipal, fue instalado y comprado por el relojero Vicat en 1863 y a él se llega accediendo por un laberinto de escaleras, en ocasiones sin luz.

-¿Es normal que sufra este retraso?

-No, no. No ocurre casi nunca.

-¿Cuántas veces va a supervisar el reloj antes del día 31?

-Suelo subir cada dos o tres días. El día 31 lo haré por la mañana y a las 21.00 horas. Durante estos días previos se realiza una revisión más profunda en el tema de los martillos de las campanas (deben estar bien engrasados) o del cableado. Durante el año también se realiza un mantenimiento. Subimos una vez por semana para comprobar el estado de los aceites y de las piezas.

-¿Qué factores influyen en el buen funcionamiento del reloj?

-Al reloj le perjudica el invierno porque el aceite es más espeso y bloquea un poco la rueda. Entre una temporada y otra puede haber un desfase de cinco minutos.

-¿Cómo se elige al relojero de Cort?

-No lo sé. Fernando Fernández, el anterior relojero, ya estaba mayor. Desde el Ajuntament se pusieron en contacto conmigo, gracias a la experiencia de mi padre, de mi abuelo y mi bisabuelo. De hecho, desde 1903 hasta los años 60 mi familia trabajó en el buen mantenimiento del reloj. Después, mi familia lo dejó porque era necesaria una revisión total y no hubo un acuerdo en cuestión de presupuesto.

-¿Tiene un mecanismo complejo?

-No mucho. Tiene un sistema de sonería: dos campanas de cuartos y la campana En Figuera, que toca las campanadas. Tiene una maquinaria francesa. Hay otro reloj parecido en un museo de Suiza. Hoy en día nadie fabrica relojes de este tipo.

-'En Figuera' está rodeado de humedad...

-Necesitaría una reforma total. Habría que eliminar las humedades y con un aparato pequeño de aire acondicionado se podría mejorar el mantenimiento de la máquina. Hay hierros que se oxidan y hay que lijarlos. La máquina sufriría menos.

Mercedes Azagra

Foto: Pere Bota