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Primer día de feria un tanto extraño, ya que la capital alemana amaneció con una manta de nieve y con una huelga del metro, lo que dificultó los accesos a la ITB, de ahí el retraso de algunos actos por los problemas de tráfico y saturación en las puertas de acceso de los más de 29 pabellones de los que consta esta feria, que es la más importante del mundo en turismo.

En el stand de Balears, disparidad de opiniones sobre la configuración y diseño del mismo, que contrasta con la amplitud del de Fitur, principalmente en los accesos. Nada que objetar a la perfecta organización de las ruedas de contactos con los touroperadores, ya que su actual diseño lo hace mucho más directo al contacto con los touroperadores.

Asimismo, satisfacción general por el servicio de Bon Dinar en la zona de restauración del stand. Resaltar la presencia del ex conseller de Turisme, Joan Flaquer, quien departió amigablemente con el conseller Buils, hoteleros y banqueros.

El pabellón de Balears se compone de dos partes: una de ellas dedicada a la instituciones; y, en la otra, a las empresas privadas y organismos. Es en ésta última donde la delegación balear y visitantes se están encontrando con una grata sorpresa, el primer cocktail del mundo elaborado con aceite mallorquín, que se denomina «Oro de Mallorca» (dos quintos de aceite, dos quintos de zumo de pera y un quinto de hierbas dulces). La mezcla sorprende, pero agrada.

Hoy, el president Francesc Antich, que estará en Berlín para presidir los actos organizados con motivo del Día de Balears, a buen seguro que también lo prueba, como lo hicieron ayer el conseller Buils, hoteleros, agentes de viajes y políticos.

Otro dato a reseñar, es que esta ITB, a diferencia de otras, cuenta con menos visitantes que otros años. Quizás, ayer, debido a la nieve y la huelga del metro, los profesionales se dedicaron a otras cuestiones de su ámbito, pero el que quiso, como los directivos de TUI, REWE, Thomas Cook o Alltours, sí que pudo cumplir con sus compromisos oficiales.