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CARMEN RUIZ/GUILLEM MAS El PSOE fue, sin duda, el gran triunfador de las elecciones generales del 9-M en la Part Forana. Ganó en 18 municipios de Mallorca, una balance histórico para el partido socialista. De hecho, hay localidades en las que el PSOE gana por primera vez unas generales tal es el caso de Consell, Santa Maria, Campanet, Lloret o Banyalbufar. Hay motivos para la euforia.

En todos los municipios, salvo en Estellencs y Escorca, el voto socialista se incrementa y en algunos casos es espectacular como en Manacor, que consigue 1.274 votos más o en Inca, que logra 699 más. En Campos, se contabilizan 460 más. Unos datos a tener en cuenta, puesto que mientras el PSOE aumenta, el PP baja. No hace tanto, en el año 2000, el PP había arrasado en todos los municipios de Mallorca, salvo en Costitx, que ganaba Unió Mallorquina (UM). En 2004, el PSOE comenzó a despegar y, en 2008, se ha consolidado manteniendo feudos tradicionales -Andratx, Calvià, Puigpunyent, Algaida, Alaró, Lloseta, Artà, Son Servera y Capdepera- y recuperando otros como Sóller, Esporles, Pollença.

Unitat
La coalición nacionalista Unitat per les Illes no cumplió con las expectativas creadas ni en los grandes municipios como Palma, Inca o Manacor, siendo ya la gran asignatura pendiente, ni en la gran mayoría de pueblos de la Part Forana, a pesar de haberse conseguido la unión de todos los partidos nacionalistas del espectro balear.

En Manacor, logró 1.589 votos y en Inca sólo 896. Los pueblos de Petra (28'1%), Costitx (24'3%), Vilafranca (24'2%), Campanet (23'6%), Sant Joan (23'2%), Llubí (22'3%) y Ariany (22'2%) fueron los únicos donde Unitat superó la barrera del 20%, siendo Petra la única localidad donde el voto nacionalista superó al PSOE, siendo la segunda fuerza política del municipio.

Así, los feudos nacionalistas de UM, PSM e independents-Entesa han mantenido con cierta dignidad sus votos, demostrándose que el fuerte bipartidismo entre PSOE y PP pudo con una coalición que pecó en exceso de buena voluntad antes que de capacidad para llegar a los ciudadanos como voto útil.

Las reticencias entre ciertos sectores de los partidos que conformaban Unitat per les Illes -UM, PSM, Entesa, Esquerra e independientes- también pueden haber influido en el fracaso de la prematura coalición al centrarse en exceso en un discurso economicista y de financiación, olvidándose del proyecto de país que se quiere construir. En la Part Forana fue donde más se centraron en su campaña electoral, pero no ha calado entre la gente.

EU-EV
Esquerra Unida-EV, en la Part Forana, se ha tenido que conformar con sólo 4.881 votos a consecuencia de la bipolarización. Los municipios donde más votos obtiene son Marratxí (548), Calvià (432), Manacor (396), Llucmajor (337) y Pollença (291). Aun así, los resultados, como ha ocurrido en el resto del país, son pírricos. En todos ellos, en comparación con los sufragios obtenidos por Progressistes en 2004, bajan considerablemente. Eso sí, en todos los municipios obtienen sufragios. Los votos de Esquerra Unida se concentraron prácticamente en Ciutat, donde obtuvo 5.350 sufragios.

UPyD
Curiosamente, Unión Progreso y Democracia (UPyD) de Rosa Díez ha obtenido votos en casi todos de municipios de la Part Forana. En concreto, en 44 localidad. Es cierto que los sufragios son mínimos, pero se coloca como la quinta fuerza política en la mayoría de municipios de la Isla. De hecho, en Calvià ha conseguido 173 votos; en Marratxí, 126 y 97 en Llucmajor. También destacan los 42 en Inca, los 25 en Felanitx o los 34 en Sóller. En la Part Forana, es el partido revelación de estas elecciones generales que han contribuido a que el partido haya obtenido un escaño en el Congreso de los Diputados.