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Un fuerte viento protagonizó la jornada de ayer en el campo de regatas del Reina Sofía. Alrededor de las doce y media de la mañana, los duques de Palma y sus hijos cogieron la embarcación real, «Somni», y pusieron rumbo al campo de regatas. Los nietos de los Reyes, Juan Valentín, Pablo Nicolás y, el pequeño, Miguel, disfrutaron a lo grande. Entre ola y ola los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín reían y jugaban en la colchoneta de la lancha hasta llegar junto a las embarcaciones que disputaron ayer la última prueba del Trofeo Princesa Sofía de Vela.

Los pequeños «lobeznos» quisieron saber cuanto ocurría, y su padre, el duque de Palma, les contaba cada una de las novedades en el campo de regata. Bien abrigados y siendo enfocados por la cámara de fotos de su madre, la infanta Cristina, además de captar imágenes a las embarcaciones, les hizo unas instantáneas a los pequeños.

Afición a la que hemos visto desde siempre practicar a la propia Reina, doña Sofía. Almediodía, la «Somni» puso rumbo a la base naval militar de Porto Pí, para poder llegar a tiempo a la comida en Palacio Marivent. Al llegar a tierra, Pablo Nicolás le pidió la cámara a su madre y le indicó a Iñaki Urdangarín que se pusiera junto a la lancha y...click.

Julián Aguirre