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M.JUNCOSA La Asociación de Constructores espera que se presenten nuevos concursos de acreedores (antigua suspensión de pagos) en Balears en los próximos meses como consecuencia del aumento de la morosidad por parte de promotores inmobiliarios y del mantenimiento del impago por parte de las administraciones públicas de obras ya ejecutadas, todo ello en el marco del actual contexto de endurecimiento del crédito por parte de las entidades financieras y de la reducción de nuevos proyectos.

«Las empresas están en dificultades cada vez mayores. Los promotores no venden y no pueden acceder a nuevos créditos, por lo que muchos de ellos no puedan hacer frente a sus pagos», afirmó el presidente de la Asociación de Promotores de Balears, Sebastià Pastor.

En relación a la administración, Pastor recordó que la patronal está recopilando las deudas que mantienen Govern, consells y ayuntamientos con las empresas contratistas asociadas por obra civil o de infraestructuras ya terminadas, algunas de las cuales datan incluso de 2004.

«De aquí a finales de año habrán más suspensiones de pagos de las que querríamos», concluyó Pastor.
El presidente de la Asociación de Constructores afirmó que estamos «al principio de la crisis», ya que indicó que las empresas constructoras están ejecutando obras con licencia anterior al desplome de los nuevos proyectos -que en España y en Balears se produjo en el segundo semestre del año, coincidiendo con la crisis hipotecaria en Estados Unidos-, por lo que pronosticó que los niveles de desempleo de irán incrementando a lo largo del año.

Según Pastor, y a la espera de cómo evoluciona la crisis financiera internacional, el alcance de la crisis inmobiliaria en Balears vendrá determinado por la respuesta de las administraciones públicas de Baleas. Pastor recordó que pese a que el Govern ha anunciado que sacará a licitación proyectos por valor de 1.000 millones de euros a lo largo de este año, «todavía no vemos obra pública por ningún sitio».

Un grupo formado por tres técnicos en prevención del Organo Paritario para la Prevención en Construcción (OPPC) visitarán «sin previo aviso» más de 170 obras del archipiélago ejecutadas por empresas integradas en la Asociación de Constructores, con el objetivo de informar y asesorar «a pie de obra» al representante de la empresa y a los trabajadores en materia de seguridad laboral.

Así queda reflejado en el convenio de colaboración suscrito ayer entre la Asociación de Constructores de Balears y la Fundación Laboral de la Construcción (FLC) mediante el cual se elimina el obstáculo» que representaba hasta ahora tener que solicitar con un mes de antelación la visita.