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JUAN M. GIMÉNEZ Los ciudadanos del ensanche de Palma no ven muy claro que este primer año de Gobierno de Aina Calvo haya sido muy provechoso para la ciudad, creen que se está haciendo más bien poco o demasiado lento. Aunque el Ajuntament supera el aprobado, por décimas, la sensación general entre los vecinos que hemos encuestado es que se trabaja a ritmo lento y no se ven grandes cambios en la ciudad. Mientras que unos pocos valoran positivamente los esfuerzos de Emaya para tener limpias las calles, muchos consideran que todavía se tiene que hacer mucho para que la ciudad esté limpia.

El tema de los transportes también es motivo de polémica. Los ciudadanos consideran que la apuesta del Ajuntament por el transporte público no se ve reflejada en las actuaciones llevadas a cabo. La frecuencia de los autobuses, la impuntualidad y otra serie de circunstancias hacen que los usuarios tengan una mala imagen de la EMT. La delincuencia ocupa otra parte importante de las quejas vecinales, el ciudadano tiene la percepción de que hay policía suficiente, pero no la consideran eficaz y en muchas ocasiones aseguran que su actitud deja mucho que desear, sobre todo ahora con la gran cantidad de inmigrantes que hay en la Isla. El ciudadano cree que la policía no actúa con la misma contundencia y en ocasiones se les da más libertad para determinadas cuestiones.