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Parece que fue ayer cuando los niños saharauis aterrizaban en Palma para, un año más, pasar su particular verano con las numerosas familias de acogida de la Isla bajo el programa «Vacances en pau». Bien, dos meses más tarde estos 154 niños, 19 de los cuales han permanecido en Menorca, regresan a casa. Ahora, a la vuelta les espera otra realidad en los campos de refugiados del Sáhara Occidental de los que hace unas semanas salieron.

Atrás quedan muchos días en los que han aprendido los rasgos más característicos de la cultura mallorquina y han compartido momentos inolvidables con su otra familia. Además, durante este tiempo muchas actividades han ocupado su tiempo libre como la tradicional visita a un parque acuático o la popular jornada deportiva de despedida. La entidad que impulsa esta iniciativa, la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui, junto con el apoyo de otras instituciones municipales esperan que el año que viene repitan como lo llevan haciendo desde hace más de 20 años.