La presidenta del Consell de Mallorca, Francina Armengol, afirmó ayer que el nuevo trazado de la 'vía conectora de accesos a Palma' o segundo cinturón «cerrará» Palma a la especulación urbanística» en suelo rústico al impedir el crecimiento en zonas como Son Sardina y Sa Garriga.
La presidenta del Consell realizó estas consideraciones durante la presentación del proyecto de segundo cinturón, adelantado ayer por Ultima Hora, en un acto al que también asistió el conseller d´Obres Públiques, Antoni Pascual.
Armengol destacó que el nuevo trazado, que ha sido aprobado por consenso de las formaciones políticas que integran el gobierno insular -PSOE-UM y Bloc per Mallorca- supondrá la «solución definitiva» al «problema» de los accesos a Palma, siempre que esta variante sea complementada con una «fuerte apuesta» por el transporte público, según dijo.
En cuanto al proyecto, está previsto el desdoblamiento de la actual carretera que parte desde el Coll den Rabassa hasta el centro comercial Alcampo, de forma similar al de la carretera de Manacor. A partir de ahí, el Consell ha previsto la construcción de un nuevo tramo en paralelo al Camí dels Reis, dando cobertura a los polígonos de Son Castelló y Can Valero y facilitando los accesos al nuevo hospital de Son Espases. Este nuevo cinturón finalizará en la rotonda de Establiments.
El Consell calcula que las obras costarán 105 millones de euros aunque no hay plazos para la licitación del proyecto, ya que la financiación la aporta el Ministerio de Fomento.
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