Minutos antes de las 11 de la noche de ayer le era comunicado a Kurt Joseph Viaene el auto de prisión provisional sin fianza y regresaba al presidio palmesano, esta vez no como detenido judicial a la espera de comparecencia sino para quedarse, y presumiblemente cierto tiempo. Había negado -con la apostilla «por ahora»-, las imputaciones del fiscal, y pese a saber que Ordinas le había mencionado con claridad en su amplia declaración minutos antes, no se mostró dispuesto a esclarecer los hechos.
Kurt Viaene, que hubo de esperar más de tres horas en los calabozos de Vía Alemania hasta comparecer, apenas estuvo treinta y cinco minutos ante la juez, una declaración breve si se la compara con la de Antònia Ordinas. La ex gerente del CDEIB no dudó en señalar al ex director general de Promoció Industrial como el alto cargo con el que se repartían las comisiones ilegales.
Frente a las ganas de colaborar con la Justicia que de pronto manifiesta Antònia Ordinas, que incluso al parecer ha asumido todos los delitos por los que está imputada en el caso, Viaene se mantiene firme negándolo todo, en tanto que debido al secreto de las actuaciones no puede conocer los detalles que ya están obrando en su contra.
Viaene ingresa en la cárcel por la presunta comisión de delitos de malversación de fondos públicos, falsificación de documento y defraudación a la hacienda pública. Y para no interferir en pesquisas sobre su actuación que todavía no han acabado.
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